Salir por las noches en verano, incluso en días de terral, es una necesidad en nuestra ciudad. Socializar a partir de las nueve de la noche es una de esas verdades que seguimos manteniendo. Da igual que al día siguiente haya que estar en pie a las siete para ir a trabajar. Salir un martes, por ejemplo, es más que necesario en Málaga. Sobre todo porque el verano nos transforma y convierte la ciudad en un malvivir entre locales y foráneos. La noche entre semana es más nuestra, por eso se descubren pedacitos del Centro que de día serían impensables por intransitables y de noche son refugios agradables.

La compañía Pata Teatro lleva unos años interpretando teatro clásico en el patio del Colegio de Prácticas Nº1. Sí, esa cancelita que hay en el lateral norte de la Constitución alberga fuera del calendario escolar las interpretaciones de obras de siempre. Este año, el clásico de los clásicos del teatro mundial: Romeo y Julieta. Una interpretación sencilla, muy correcta pero sobre todo, una representación cercana, íntima, en un escenario que permite imaginarse como un habitante de aquella Verona marcada por la rivalidad de Montescos y Capuletos. Apenas 100 personas por función, seis actores y más de una hora y media de teatro que vivir en primerísima persona.

Hay que ir. No porque te lo diga yo. Hay que ir porque vale la pena, hay que ir porque la compañía lo vale, hay que ir porque el ambiente lo merece, hay que ir porque cuesta muy poco para lo que vale ver un espectáculo así en un escenario como el patio porticado del Prácticas Nº1. Hay que ir, en definitiva, porque pocas veces podemos ser parte de la obra que se interpreta en Málaga cada día en la que los de aquí somos secundarios. Por eso, por tomar los espacios que son nuestros, te animo a que vayas a ver Romeo y Julieta de Pata Teatro al centro, al mismo centro, de tu ciudad.