'La conciencia versus populismo', por Venancio Rodríguez Sanz

Que hoy en día hay poca reflexión, es evidente, ya lo dijo Hannah Arendt. Solo tenemos que abrir cualquier periódico y leer la cantidad de delitos que se cometen a diario. Sin tener en cuenta los genocidios, masacres, holocaustos, exterminios, etcétera. Cometidos a lo largo de la historia de la humanidad. A mi entender, esto es debido a la peligrosa idea de que el bien tiene algo que ver con lo que piensa o hace la mayoría, como si el bien estuviera supeditado a la democracia. Porque una persona puede tener más razón que el mundo entero: ahí tenemos los casos de Sócrates, Jesucristo, Gandhi, Martin Luther King y otros. Con la perspectiva que nos ofrece el tiempo, quién, en su sano juicio, se atrevería a afirmar que Hitler tenía razón al matar a cientos de miles de judíos. Esto que parece una locura; sin embargo, hoy se sigue cometiendo con los indígenas en todos los continentes, ¡y tan felices! Por eso pienso que, si hay alguna esperanza para la humanidad, esta la traerá el individuo. Porque está visto que no podemos confiar en los gobiernos que necesitan populismo para seguir gobernando, ni en la democracia, ni en grupos sociales que buscan parcelas de poder, ni en entidades que sirven a ideologías, ni en empresas que dependen de las ventas para subsistir… En lo único que se puede confiar, es en la conciencia individual y nada más. Aunque esto nos obliga a buscar la verdad pero, ¿dónde está este bien tan preciado?