Guadalmedina

Acaban de pasar unas insistentes lluvias poco inusuales en Málaga, cosa que se agradece y que ha venido como anillo al dedo; ¡Pero!, la preocupación era constante; mi vista ha estado encausada al cauce del río de la ciudad, Guadalmedina, pues la autoridades responsables hacen caso omiso a los constantes comunicados vía Facebook y otros medios.

El tema es que dicho cauce está completamente invadido por arboleda y matojos, de lo que se deduce que si llega a llover con más intensidad, la desgracia puede hacerse presente y de qué manera; pero los afines a la Junta pasan del tema y si ocurre la desgracia, entonces lo limpian y todo subsanado y el vivo al bollo y el muerto al hoyo.

Esta misiva seguirá cayendo en saco roto; no le pidas peras al olmo. Buenos días.

Pedro DuránMálaga