Hay cantera, te lo juro. El Carnaval de Málaga no está muerto; ni siquiera está peor que hace unos años. A veces, de puertas para adentro, el mundillo carnavalesco quiere darse esa impresión. Todo está mal, fatal, peor. No hay futuro, siempre lo mismo, no salen los mejores...
Llorar a los que faltan está muy bien, claro que sí, es justo, pero no podemos cerrarnos en el derrotismo. Sobre todo porque hay un dato sencillo: Hace una década, nuestro carnaval sólo tenía en las tablas del teatro a una agrupación infantil, este año hemos tenido cuatro infantiles y, ¡ojo!, una comparsa juvenil. Y tú dices que la cosa va por mal camino.
De las cuatro murgas infantiles, poco puedo decir. A la histórica y conocida de Paqui Prieto se han ido sumando la del Susi, la de Alberto o la de Ronda. Y es para verlo, debe de haber unos 200 niños disfrutando en las tablas del teatro. No quiero venderte la moto, pero tampoco quieras que compre tu derrotismo. No sé qué te parece, pero es que con la segunda de la murga de Paqui Prieto ya hay otra comparsa juvenil para salir el año que viene... Tenemos mucho por delante. Entiendo que a ti Momo te dijera que todo estaba mal, pero eso es porque era un sueño. En tu caso diría que una pesadilla. Yo no te hablo de sueños, te hablo de lo que hay. Yo sé que tú no eres el demonio, porque sé que ni yo ni ninguno somos Momo. Yo soy un tipo pragmático y veo que tenemos gente apretando y con ganas. A la cantera del carnaval le pasa como a la del fútbol, que no sabes si es o no la mejor, pero es la tuya. Prefiero mil veces a un canterano que a un mercenario.
