Esta semana se celebra otro Día Mundial del síndrome de Down y en esta ocasión quiero que sea especial. No me gustaría que las acciones de sensibilización proliferen este día para después caer en el olvido. Mi sueño es que estos mensajes calen todo el año, por lo que he tenido la suerte de impulsar, de la mano de expertos de la Fundación Adecco, una guía en lectura fácil para ayudar a encontrar empleo a las personas con discapacidad intelectual; un documento que estará vivo todos los días y meses del año.

La sociedad sigue mirándonos con sobreprotección, prejuicios, en ocasiones indiferencia e incluso discriminación. Estas actitudes se trasladan a las empresas, donde seguimos subrepresentados. Sin embargo, el empleo es el principal factor de inclusión social y sin trabajo nunca habrá normalización.

Estoy orgulloso de tener 45 años, de ser malagueño y de tener síndrome de Down. Me gustaría que todas las personas con discapacidad intelectual y sus familias puedan decir lo mismo. Esta herramienta es un recurso para conseguirlo, para empoderar a las personas, para que estén más cerca del empleo, de la realización personal y de la independencia.

Por supuesto, todo ello debe ir acompañado del compromiso de las empresas, de los poderes públicos y de la sociedad civil, a quienes también espero llegar a través de estas líneas: la plena inclusión de las personas con discapacidad nos atañe a todos. De nuestros gestos, miradas y actitudes dependerá que la presencia de la discapacidad intelectual se normalice en todas las esferas sociales.

*Pineda es el primer diplomado europeo con síndrome de Down y es consultor de Diversidad de la Fundación Adecco