A punto de sellar su esperada ampliación de contrato con el Atlético de Madrid, recién cumplidos los 200 partidos en la portería rojiblanca, ya por 201, y admirado por su destreza, sus números -114 encuentros imbatido- y su firmeza, Jan Oblak se enfrenta con un desafío todavía pendiente: el Camp Nou.

Ni ha ganado ni ha mantenido su portería a cero ni ha sido tan definitivo con la constancia como suele serlo para su equipo en ese escenario, de los más exigentes del mundo, contra el mejor futbolista del planeta, Lionel Messi, y uno de los equipos más potentes. De sus cinco visitas, en ninguna terminó su marco a cero.

Ni el 3 de marzo de 2018, su desplazamiento más reciente a ese estadio, con el 1-0 con un golazo de falta de Lionel Messi; ni el 2 de septiembre de 2016, con el tanto azulgrana de Iván Rakitic y un 1-1 en el marcador; ni el 5 de abril de 2016, en la Liga de Campeones, con un 'doblete' de Luis Suárez y con un ejercicio de resistencia liderado por él y su defensa con el que sobrevivió el Atlético; ni el 30 de enero de 2016, en un 2-1 para los azulgranas con tantos de Messi y Luis Suárez; ni el 21 de enero de 2015, cuando paró un lanzamiento de penalti al argentino, que anotó de rechace.

Tres goles de Messi y otros tantos de Luis Suárez en las siete dianas en contra, cuatro derrotas y un empate de Oblak en el Camp Nou, uno de los únicos tres campos de la Liga española en los que jamás ha dejado su portería a cero con el Atlético. Sólo el recinto azulgrana, el estadio Montilivi de Girona y el Nuevo Zorrilla de Valladolid le quedan pendientes, aunque con distinto número de partidos en cada uno de ellos: cinco, dos y uno, respectivamente.

En el resto de los campos de España, sí salió airoso, sin un solo daño, al menos una vez. Aparte del Vicente Calderón y el Wanda Metropolitano, las casas de 'su' Atlético, hay 23 en la Liga y uno en la Copa del Rey en los que ha permanecido imbatido. Balaídos, en Vigo; Los Cármenes, en Granada; y el Coliseum Alfonso Pérez, en Getafe, por encima de todos, con tres porterías a cero en cada uno.

Tampoco fueron capaces de marcarle goles en al menos un partido como locales ni el Real Madrid ni el Eibar ni la Real Sociedad ni el Betis ni el Rayo ni Las Palmas ni el Leganés ni el Valencia ni el Málaga ni el Alavés, en dos encuentros; ni el Córdoba ni el Villarreal ni el Sevilla ni el Athletic ni el Osasuna ni el Espanyol ni el Deportivo de La Coruña ni el Levante ni el Huesca, en uno.

Tampoco L'Hospitalet en la Copa del Rey, precisamente su primer duelo sin goles en contra, disputado el 3 de diciembre de 2014 y resuelto por 0-3 a favor de su equipo. Después le han seguido 113 partidos más imbatido, 48 de ellos a domicilio, incluidos siete adversarios europeos: Galatasaray, PSV, Rostov, Roma, Qarabag, Marsella y Brujas. Otros 65 corresponden a sus partidos como local.

En contraposición están el Barcelona y el estadio en el que ha sufrido más derrotas como visitante, con cuatro, y con el que uno de los mejores porteros del mundo del momento, sino el mejor, mantiene aún un desafío pendiente. Con el Camp Nou, Messi y Luis Suárez. Todos confluyen este sábado frente a él en un duelo por LaLiga.