El dinamismo de Málaga, que la hace ser la capital económica de Andalucía, debe aparejar un modelo de desarrollo económico para la ciudad y provincia en el que se contemple un verdadero impulso comercial, industrial, turístico, cultural, financiero, etc., y disponer, acorde a ello, de un conjunto de infraestructuras que aporten soluciones para la consolidación económica y que, además, permitan la expansión del desarrollo futuro.

En los últimos años, Málaga, capital y provincia, ha experimentado unas grandes mejoras en todo tipo de infraestructuras y equipamientos, fruto del esfuerzo y del trabajo realizado por nuestras Administraciones Públicas y nuestras empresas, pero, la realidad presente nos hace ver lo imprescindible de continuar con nuevas y mayores inversiones, aprovechando el final de la crisis.

Los pasados veinte años han sido realmente positivos en la creación y puesta en marcha de equipamientos: la llegada del AVE, la nueva Estación María Zambrano, el soterramiento de las vías del ferrocarril, la ampliación del Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol y la entrada en servicio de la segunda pista, la culminación de la autovía Málaga-Almería, la entrada en servicio de la autopista de Las Pedrizas, las rondas de circunvalación ejecutadas, el Plan Especial del Puerto con los nuevos muelles, la Estación Marítima y el impulso del sector cruceros, la creación de importantes museos en la ciudad como el Picasso, el de Málaga, el Carmen-Thyssen, la ampliación de la planta hotelera de la ciudad, etc.

Hasta aquí, todo magnífico. Veinte o más años de un salto cuantitativo y cualitativo digno de elogio y de estar orgullosos por lo conseguido, pero, creo que todos sabemos que no es suficiente. Hemos de ser conscientes y, poniendo la vista en el futuro, dar soluciones a lo pendiente y plantear nuevos proyectos realistas que, de verdad, creen riqueza y empleo.

Precisamente, el diario La Opinión de Málaga, al que aprovecho para expresar en nombre de la Cámara de Comercio de Málaga nuestra más sincera felicitación por su XX aniversario y destacada presencia informativa, organizó hace unos días un foro en el que tuve el honor de participar, dedicado a la situación de los grandes proyectos pendientes en nuestra ciudad y provincia, donde se trataron y quedó patente, la obligación de continuar aunando esfuerzos entre Administraciones Públicas y sector privado para dar solución a temas que se llevan reivindicando desde hace más de dos décadas.

Un foro, que nos permitió, desde distintos tipos de enfoque, exponer y comentar las diferentes carencias y problemas que tiene nuestra provincia, para hacer hincapié ante las Administraciones de la necesidad de abordar con rigor, acometer y culminar lo antes posible, aquellos proyectos que nos faciliten seguir siendo un referente internacional, sobre todo ante las prioridades que plantea la industria turística provincial.

Y es que, hay destinos turísticos que nos pisan los talones y nos ganan terreno. No solo el Brexit es un problema a corto o medio plazo. Nuestra industria turística debe continuar innovándose y presentar una oferta de calidad más competitiva para seguir atrayendo turistas de múltiples destinos, pero, para ello, se ha de prestar más atención y ayudas desde las Administraciones, lo que conlleva la realización de nuevas infraestructuras y equipamientos, así, como la resolución de todos esos viejos incumplimientos que precisan de una pronta solución.

Entre esas actuaciones pendientes de acometer o terminar, podríamos destacar, para la ciudad, un plan para el Guadalmedina, la mejora de los accesos al Parque Tecnológico, los problemas que sufren los polígonos industriales, la terminación del Metro, la rehabilitación y ordenación del Centro Histórico, la dinamización de los mercados municipales, o la construcción, en un lugar adecuado, de un Auditorio para la ciudad. Por su parte, a nivel provincial, dar solución al tema del abastecimiento de aguas, así como al grave problema del saneamiento integral, que tanto afecta a la calidad de nuestro producto turístico, sin olvidarnos de la creación del tren litoral, al menos, hasta el Campo de Gibraltar, así como la mejora de la conexión del ferrocarril al Puerto de Málaga.

En cuanto a esta última infraestructura, me gustaría indicar que nuestro Puerto, esa zona de la ciudad que queda al borde del mar, no solo ha de servir como zona de tráfico turístico, esparcimiento y ocio, cosa que está fenomenal, sino que, históricamente, ha tenido un uso y un servicio para el comercio de los productos de nuestra tierra, que no puede quedar de lado.

De su más adecuada conceptualización como elemento dinamizador de nuestro comercio, nuestra industria y de nuestras exportaciones, ha de servir igualmente para lo que fue creado, para el tránsito de mercancías y personas.

En síntesis, creo que Málaga comienza a vivir un mejor momento y que ha de ser aprovechado para avanzar en beneficio de todo el conjunto de la economía y la sociedad de nuestra provincia. El progreso de esta tierra va a depender de todos y cada uno de los proyectos que seamos capaces de sacar adelante, por supuesto, de forma aunada, administraciones, empresas y ciudadanos, lo que redundará en calidad, bienestar, empleo y riqueza para todos los que vivimos en esta hermosa tierra.

*Pérez Casero es presidente de la Cámara Oficial de Comercio, Industria, Servicios y Navegación de la Provincia de Málaga