Sí, ¿a dónde vas, Albert Rivera, líder de ese partido llamado Ciudadanos, que subió un día a la palestra para combatir todos los nacionalismos y la rampante corrupción, y parece no querer acordarse hoy más que de lo primero?

¿A dónde vas, Rivera, convertido en el nuevo hooligan de nuestra derecha? ¿A dónde, compitiendo con ese lenguaje tabernario, más propio de un tertuliano exaltado que de un serio legislador?

¿A dónde pretendes dirigirte con esos insultos y salidas de tono? Hablas con desprecio, rayano en el odio, del partido del presidente (en funciones) del Gobierno y sus potenciales aliados, calificándolos de «la banda».

Y llega tu portavoz parlamentaria y repite ese insulto que parece ya una consigna para arrojar caprichosamente fuera del marco constitucional a partidos - sí, también los nacionalistas o independentistas, nos gusten o no-, democráticamente elegidos por los ciudadanos.

Una «banda» es una organización creada para delinquir: en este caso para «liquidar» a España, según tu hiperbólica acusación. ¿Tan fácil crees que sería acabar con esta milenaria nación de naciones, a la que tú pretendes meter en tu lecho de Procusto?

¿No tienes mejores argumentos que oponer a quienes combates con la joseantoniana idea de España que tan vehemente defiendes? ¿No te das cuenta acaso de que te están poniendo a la altura de aquéllos a los que calificas de «golpistas»?

¿Es ése el lenguaje de alguien que pretende ser el líder de un partido liberal? ¿Es de extrañar que con te hayan ido abandonando, asustados, algunos de los estuvieron a tu lado desde el principio y a quienes ahora descalificáis todos desde la dirección como «socialdemócratas»?

Sólo pareces últimamente querer incondicionales a tu lado, gente que se limite a seguir al pie de la letra tus instrucciones, la agenda que les marques, y que repitan cual papagayos eso que llaman ahora «argumentario».

¿Es ése el partido con el que, para irritación del despechado Podemos, quiso aliarse en su día ese mismo presidente del Gobierno al que hoy consideras sólo jefe de «una banda»?

¿Pretendes con ese lenguaje faltón, con tu retahíla de insultos, con tu negativa incluso a dialogar con el líder del partido al que votaron mayoritariamente tus compatriotas, pretendes sustituir al PP y liderar la oposición?

Creo, Albert Rivera, que te equivocas, como creo que yerran quienes te siguen ahora ciegamente, Y si no por desgracia no acertase con mi predicción, reconocería humildemente haberme equivocado€ de país.