Nos sentimos más motivados cuando nuestro carácter, nuestros valores y nuestras necesidades están adaptadas al contexto. De aquí la importancia de la formación tanto para deportistas como para entrenadores y padres.

Lo que seamos capaces de hacer dependerá de la interpretación que hagamos de la experiencia pasada y cómo afrontemos el presente. Existe la teoría del establecimiento de metas que trata de lo que se quiere conseguir o hacer y es muy importante que lo esperado sea alcanzable y realista. La importancia de estas características está relacionada con la motivación, ya que es la responsable de la búsqueda y consecución de metas, y a cada uno le motivan las cosas de diferente manera.

Por tanto, cuando percibamos descenso en la motivación o desinterés, debemos encontrar qué motiva, cómo motiva y qué compromiso se adquiere en relación a la motivación. No encontraremos superación y esfuerzo máximo sin motivación y compromiso. También si queremos generar aprendizajes nuevos y con ellos determinados comportamientos, debemos motivar, incentivar a la consecución de nuevos objetivos y en ello está implícito la continua adaptación y continuo cambio.

Enseñar a establecer autometas desde pequeños es una buena forma de fomentar responsabilidad, compromiso y superación.

«No voy a permitirme más decirme a mí mismo que no puedo».

«No voy a aceptar la pereza para ir al gimnasio, iré 3 veces en semana en un horario predeterminado».

«Voy a dormir solo en mi cama de lunes a viernes».

«Voy a sentarme a estudiar cada día 45 minutos mínimo, aunque sea para leer».

Es importante que se genere compromiso y para ello es importante analizar la capacidad en relación con la dificultad, si es muy complicado o aún falta experiencia, la motivación desciende y con ella el compromiso.

Por otro lado y no por ello menos importante es fundamental analizar el contexto y las personas directamente relacionadas con dichas metas. Si unos padres nunca van a ver a su hijo jugar, puede ser que éste sienta tristeza y confunda su compromiso o interés hacia la tarea. ¡Recordad que la motivación es el motor de la vida! Los educadores y entrenadores también cobran especial importancia en establecer una relación adecuada, cuidar de los detalles de las diferentes personas que tienen a su cargo y establecer metas adaptadas a cada uno, motivantes y alcanzables.

El feedback o retroalimentación favorece la motivación y la consecución de metas. Los deportistas necesitan saber cómo van y hacia dónde van, los estudiantes, los trabajadores, las relaciones de pareja, los grupos... una correcta retroalimentación aporta mucha información de la experiencia sentida, del presente vivido y del futuro por vivir. Esto no significa que dichas aportaciones provengan solo de entrenadores o profesores, sino que se puede trabajar en las dos direcciones aportando nuevas metas y por qué no autometas para generar más motivación y compromiso.

Por tanto, si queremos educar en compromiso y superación, escojamos metas adecuadas. Si queremos mantener viva la perseverancia y la resiliencia hagamos feedback y retroalimentación. Y si queremos ser buenos educadores, formémonos en cómo conocer mejor a las personas y a nosotros mismos para aplicar y aplicarnos las metas adecuadas para seguir avanzando y mejorando.