Ocurrencia o posibilidad

Sin duda, la fragmentación del voto en un sistema electoral como el español, no sólo complica la gobernabilidad, sino que puede distorsionar la verdadera relación de fuerzas en el escenario parlamentario. Pero ese es el modelo que ha funcionado en España desde la recuperación de las libertades democráticas y es preciso aceptar las reglas del juego tal y como son. De ahí, que puede parecer un poco absurda la propuesta del Partido Popular de corregir la actual atomización de la derecha en un remedo de coalición, la llamada ‘España Suma’, que, en realidad, al menos a mí me lo parece, lo que pretende es hacer de Pablo Casado el candidato único de tres formaciones que, a día de hoy, tienen sus propios líderes, propuestas y estructuras. Que sería mejor para el futuro de España y su estabilidad que el centro y la derecha se fusionaran en un solo partido, es muy opinable, pero la ocurrencia de los populares no es más que la búsqueda de un atajo improbable e ineficaz. Sólo en casos muy puntuales, como en Navarra o, tal vez, en el País Vasco, donde están en juego asuntos nucleares como la defensa de la unidad del Estado, puede ser una fórmula admisible. Lo demás, pienso, es equivocar la solución al problema.

Jesús D Mez MadridMálaga