Porque: «Son una forma cruel de maltrato animal. Porque es un delito. Porque es cruel criar animales para torturarles y darles muerte. Porque supone una forma de explotación animal. Porque las dehesas acaban con la biodiversidad y desertizan los bosques. Porque no viven tan bien como quieren hacer creer. Porque antes de salir a la plaza, los toros son drogados, atemorizados y torturados. Porque los toros son altamente sensibles, sociables e inteligentes. Porque no es una lucha de igual a igual. Porque el 80% de los toros indultados mueren al cabo de pocos días por las heridas de la corrida. Porque no solo se tortura el toro, también a los caballos de los picadores. En ocasiones, incluso se les cortan las cuerdas vocales para que no relinchen. Porque es una práctica más propia de otros siglos que del XXI. Porque solo es legal en ocho países del mundo. Porque en la situación actual es completamente indigno que se destine dinero público para este tipo de espectáculos. En fin, yo soy partidario de hacer una derrama entre todos los que no somos partidarios de esta bestialidad. Aunque sea solo de 1.000 euros mensuales para el mantenimiento de estos pobres animales y de las personas que se ven abocadas a vivir de su sufrimiento. ¿Quién me secunda?

Venancio Rodríguez

Málaga