Arrimadas, peor que peor

La mentalidad todavía poco democrática de nuestro país se manifiesta también en los repetidos fracasos de los partidos centristas, incluido el carácter poco dialogante del que acaban contagiándose sus mismos jefes, llevándolos a estrepitosos tropiezos y una inevitable dimisión.

Veo, pues, con alarma que, tras lo ocurrido con Rivera y sin aprender la lección, parece que Ciudadanos está a punto de caer de la sartén al fuego y elegir, por urgencia o cobardía de algunos, a su ‘arrimada’ y ‘yes-woman’, quien a pesar de conseguir más poder que Rivera en Cataluña, tuvo que dejarla, derrotada por su nula capacidad de diálogo y su lamentable habilidad para agravar los problemas, Inés Arrimada. Ojalá yo me equivoque y sepa ese tan conveniente partido evitar un segundo y quizá definitivo error.

Paula Rosales Muñoz. Fuengirola