La otra noche echaron un reportaje en TVE sobre Teruel. Comando actualidad, se llama el espacio. Teruel existe pero lo mejor que se puede hacer por él es sacarlo en la tele. Hay trufas (exportadas a todo el mundo) y buen jamón, excelente aceite, aire limpio, paisaje estimulante, eficaz y productiva ganadería, cordero por ejemplo, buena gente y unos yacimientos arqueológicos que en otros sitios y como dicen los cursis, estarían puestos en valor.

Tienen un excelente parque de dinosaurios que haría las delicias de todos los niños y frikis, yo el primero, de Europa. Pero lo que no tienen son buenas carreteras ni tren rápido ni nada de nada. El frío no es inconveniente. Más frío hay en Moscú o Londres y la gente no para de mudarse allí. Teruel está de moda porque sus gentes han organizado un partido, una agrupación de electores, y han conseguido escaño en Congreso y Senado. Han pedido cosas a Sánchez, como todos, pero no sabemos si lo van a conseguir, dado que entre que contenta al PNV, a Esquerra, a Revilla (para que le vuelva a apoyar), a las regiones potentes y a las gritonas, no queda nada de dinero. Pero ya han conseguido algo: salir en la tele por estar de moda. Moda pasajera pero moda. Teruel mola. Como género periodístico. Este artículo por ejemplo es una loa a Teruel escrito por el impulso de la simpatía pero también por haberlo visto en la tele.

Yo viajé a Teruel de niño. Me llevaron mis padres en un Seat 850 colorado. No recuerdo el frío. Lo que recuerdo es la gozada de viajar, sentirse uno libre y esas cosas. Los padres jóvenes, la emoción de un sitio nuevo. La idea de este artículo no sabe uno muy bien si es presentarlo a un premio periodístico sobre Teruel (ahí les brindo la idea, que eso da mucha resonancia) o decir que pese a otras tendencias o moderneces, la televisión es la que da y quita. Que sí, que todos nos estamos pasando a Netflix pero lograr asomarse (no solo a TVE, se han emitido programas del mismo corte en televisiones varias) con la consiguiente publicidad, a un espacio que vean varios millones de personas es una gran manera de conseguir algo. Aunque sea por el hecho de que a algunos políticos se les debería caer el morro de vergüenza por haber primado tanto, tanto, a unas zonas de España sobre otras. Teruel como ejemplo. Teruel, persiste.