La epidemia de coronavirus pierde fuerza en Wuham, que con 11 millones casi triplica la población de Madrid. Si en esa ciudad (a grandes números) los infectados han sido unos 70.000, supondrían en torno al 0,6%. Si la mortalidad por la infección en China ronda el 4% del número de infectados, tendríamos, con lo anterior, una aproximación a los efectos de la epidemia en un marco menos desarrollado que el nuestro. Desde luego la confirmación de la superación de la crisis en China sería una gran noticia para el mundo en el plano sanitario, pero también un gran reto en el político, pues no tendría sentido que las sociedades occidentales con Estado de bienestar, en general mejor dotadas en sistema de salud, se manifestaran impotentes para afrontar el problema. Ya se ha hablado aquí de los muertos políticos que dejará la crisis, pero esa otra epidemia no ha hecho más que empezar.