Incongruencia:

1. Falta total de coherencia entre varias ideas, acciones o cosas.

2. Conducta o expresión que contradice a otra o no guarda con ella una relación lógica.

Las dos acepciones que recoge la RAE para la palabra incongruencia se han cumplido en la política sanitaria del Partido Popular en materia sanitaria en nuestra provincia durante el verano de 2020 y como consecuencia de ello estamos padeciendo el colapso de la Atención Primaria entre otras situaciones.

CCOO viene presentando un informe de la actividad asistencial en los centros sanitarios malagueños en relación al plan de vacaciones que publica el SAS. Este informe fue presentado en rueda de prensa el 7 de julio de 2020, que se puede consultar en las hemerotecas por la amplia difusión que tuvo. En el citado informe, a tenor del análisis de los datos de sustituciones aportados por los centros, en las conclusiones 4 y 5 recogíamos la previsión de un año complicado en la asistencia en Málaga sobre todo en la Atención Primaria.

En Atención Primaria los datos aportados reflejan un porcentaje de sustituciones similares e incluso inferiores a los años precedente y se mantiene el mismo esquema estructural por las tardes.

Todo es indicativo de que el presupuesto de sustituciones con respecto a 2017 es muy inferior y no se adecua a las necesidades sanitarias reales de Málaga. Es lógico pensar que este año ha habido una dotación presupuestaria similar a 2019 y muy distante de las llevadas a cabo en 2017 y 2018, aunque desconocemos la cifra de gasto que no se ha hecho pública.

No se aumentó la partida presupuestaria para sustituciones de profesionales en un momento que habían profesionales disponibles en bolsa y los contratos fueron mayoritariamente de uno o dos meses, cuando en otras comunidades autónomas se realizaban contratos como mínimo de seis meses y cuando no de un año. Desde la Consejería de Salud se planificó un verano similar a los anteriores, no tuvieron en cuenta otra serie de factores como son los meses duros de la pandemia que habíamos sufrido, el incremento numeroso de bajas que se había producido entre el personal sanitario por contagios del Covid-19, el más alto de toda España y sobre todo el grado de carga laboral soportado por los profesionales. Se presupuesta como en años anteriores.

Haciendo una estimación en relación a 2017, cuando el presupuesto para el verano ha sido el mayor de la historia reciente, se habían detraído 3,5 millones de euros para sustituciones, sin embargo en el mes de agosto de 2020 se hizo pública la partida presupuestaria de 26 millones de euros para actividad quirúrgica concertada. Esta es la primera incongruencia, proclamar a los cuatro vientos la apuesta decidida por la Atención Primaria para control de la pandemia, sin embargo se recortan recursos a la misma y se apuesta todo a los conciertos de la sanidad privada para reducir listas de espera.

Intentar fortalecer la Atención Primaria con el mismo presupuesto del año anterior, sin Covid, es de ser ilusos o tener poca idea de cómo se iban a desarrollar los acontecimientos. El colapso sanitario en Atención Primaria solamente era cuestión de días a pesar de las citas telefónicas que se idearon como panacea y que se ha demostrado que duplica el trabajo de todo el personal de Atención Primaria desde médicos hasta administrativos, a pesar de todos los mensajes desde la Consejería de que todo estaba bajo control. El control era esperar entre ocho y catorce días para una consulta telefónica como públicamente han denunciado tanto pacientes como asociaciones de vecinos. El control eran colas de dos horas en los centros de salud porque Salud Responde no responde. Y el control era las autoderivaciones de los pacientes a las urgencias tanto extra como intrahospitalarias para poder resolver sus problemas de salud.

Ante este panorama el propio delegado de salud de Málaga ha reconocido el colapso de la Atención Primaria. Pide perdón por las molestias ocasionadas y dice literalmente que no hay soluciones milagrosas para esta situación. Sin embargo se dedica a rezar a diario para que todo se solucione, aquí hay otra incongruencia importante que es casi cómica. Si no hay soluciones milagrosas para qué solicita un milagro a través de sus rezos. Es cierto que no hay situaciones milagrosas en eso coincidimos, pero con una mejor planificación en junio, con una partida presupuestaria acorde con las necesidades, cuando había profesionales en bolsa de trabajo, con contratos menos precarios que los que se ofrecen, reforzando las plantillas de Atención Primaria de todas las categorías y en fin cumpliendo las promesas electorales de poner los recursos sanitarios al 100%, de contratos como mínimo de seis meses y un largo etcétera no cumplido por el Partido Popular no hubiera sido necesario elevar rezos al Altísimo para que soluciones el problema de la sanidad en Málaga.

*Rafael González Delgado es secretario general del sindicato de Servicios Socio Sanitarios de CCOO Málaga