Cartas al director

Después de la euforia del Gobierno tras la cumbre Europea del pasado mes de julio, en la que se aprobaron 750.000 millones de fondos para la recuperación económica, de los cuales se anunciaron, a bombo y platillo, que a España le habían adjudicado 140.000 millones, la cruda realidad es que de aquella lotería en la que nos había tocado ‘el gordo’ a la cantidad que nos va a llegar hay una más que considerable diferencia.

Si nos atenemos a las recientes fuentes de la Moncloa y de Economía, el Gobierno va a reclamar las ayudas directas a fondo perdido, pero ha descartado, al menos de momento, pedir los 70.000 millones que nos habían correspondido en concepto de préstamos.

No se han explicado todavía con detalle las razones de esta decisión por parte del Ejecutivo, pero resulta poco menos que sorprendente que se prescinda de esta millonaria cantidad de euros, en unos momentos que no son precisamente los mejores para hacerlo, con una economía como en la española, empobrecida, en deuda como nunca, con un altísimo nivel de paro, con una situación y un PIB en recesión, con multitud de negocios en quiebra y millones de personas en situación muy precaria. Es difícil de entender, como tantas cosas.

Enrique Stuyck Romá. Málaga