En las publicaciones de temas turísticos malagueños, aparecen frecuentemente alusiones al Castillo del Inglés de Torremolinos. Aquella fortaleza de carabineros, construida en 1763, y la hermosa finca que la rodeaba fueron adquiridas el 22 de mayo de 1905 por el comandante (retirado) del ejército de su Majestad Británica don Jorge Langworthy. En los años treinta aquel bondadoso anciano, enamorado de España, convirtió su propiedad en uno de los hoteles más bellos del Mediterráneo. Aparte de ser un buen hombre, fue un visionario. Tuve el honor de trabajar en su hotel a finales de los años cincuenta. Él ya había fallecido. En su entierro, la buena gente de Torremolinos se echó en masa a la calle. Todavía se hablaba de él en el pueblo con un inmenso respeto y afecto.

Desgraciadamente, en la década de los setenta ese pequeño paraíso que fue el Hotel Santa Clara simplemente fue borrado de la faz de la tierra. La miopía de unos y la codicia de otros fueron responsables de la desaparición de aquella maravilla. Incluidos los vestigios de los tiempos de los romanos que milagrosamente se habían conservado en aquel enclave. Una historia, no tan inusual, con final trágico, que nunca podremos olvidar.

En otro lugar de Andalucía tuvieron más suerte. Me alegro por ellos. Me refiero al castillo de Mairena del Alcor, en tierras sevillanas y a su antiguo propietario, otro 'gentleman' inglés, Jorge Bonsor. Todavía los antiguos del lugar lo llaman el castillo de Luna. Antes lo llamaban el Castillo del Inglés. O simplemente el castillo de Bonsor. Tiene esta espléndida fortaleza una larga y apasionante historia, como lo confirman desde el Ayuntamiento de la ciudad:

«Los últimos estudios realizados fechan su origen en 1342 tras la donación del lugar de Mairena a Don Pedro Ponce de León por el rey Alfonso XI, como parte del programa de repoblación y fortificación de la campiña sevillana, en compensación por la ayuda prestada en las campañas militares de la batalla del Salado y el Sitio de Algeciras. Su construcción se realizó en 4 fases repartidas desde mediados del siglo XIV hasta el primer tercio del siglo XVI».

Confieso que hasta hace poco sabía muy poco de George Edward Bonsor. Por supuesto, ya no es así. Gracias a la generosidad de un joven y brillante periodista de Mairena, Juan Antonio Moreno. La que me ha permitido saber que Bonsor fue uno de los padres de la mejor arqueología andaluza. Británico de pura cepa y andaluz por vocación, nació en Lille (Francia) en 1855. Fue un espléndido pintor e historiador, además de un brillantísimo y autodidacta arqueólogo, que descubrió en tierras andaluzas auténticos tesoros. Como la necrópolis y el anfiteatro romano de Carmona, entre otros. Enamorado de los Alcores, adquirió el castillo de Mairena del Alcor. Con paciencia y respeto, lo fue convirtiendo en su vivienda y museo particular.

Juan Antonio se puso recientemente en contacto conmigo gracias a un artículo que publiqué el pasado 29 de agosto en La Opinión de Málaga. Los portentos de internet hicieron posible que llegara 'Arthur Riggs, un fiel amigo de España' a sus manos. En él contaba un servidor de ustedes la historia de un ilustre ciudadano norteamericano, Arthur Stanley Riggs. Eminente escritor y arqueólogo, colaborador del New York Times y prestigioso marino, que dio su nombre a un buque de guerra americano. Publicó un libro imprescindible dedicado a España: 'The Spanish Pageant'. En su introducción, el autor mencionaba un lugar y una fecha: Mairena del Alcor, 13 de julio de 1927. Tengo la impresión de que Juan Antonio Moreno tardó solo unos segundos en asociar aquella presencia en Mairena de Arthur Riggs a la persona de Jorge Bonsor. La documentación que he podido estudiar así lo confirma. Ya les contaré.

También agradezco el haber podido conocer a una ilustre experta en la obra de Bonsor: la profesora Ana Gómez Díaz, arqueóloga y conservadora del castillo de Mairena y las colecciones del maestro, gestionados y tutelados por el Ayuntamiento de la ciudad. Pertenece al grupo de Investigación 'Historiografía y Patrimonio Andaluz'. En la actualidad es coordinadora de la sede del Aula abierta de Mayores de la Universidad Pablo de Olavide en Mairena.

¡Felicito a la admirable buena gente de Mairena del Alcor! Nos han recordado que Andalucía puede ser grande.