Málaga hace historia

Los días plomizos en Málaga favorecen y acogen reflexiones más iluminadas sobre nuestro propio devenir y el del horizonte de esta ciudad que algunos desean transgredir a toda costa; estas jornadas impregnan cada rincón tras el estallido del color cárdeno el cual nos invita a un mayor recogimiento en este tiempo de clausura precautoria. Según estudios realizados, el mal clima esparce nuestra disposición y habilidades intelectuales, posibilitándonos pensar de una forma más concentrada y clarividente. Así lo afirma el profesor de la Universidad de Nueva York Adam Alter, quien apunta: «La luz del sol adormece a la mente del riesgo y el pensamiento cuidadoso».

En una tarde donde el gris estimula nuestros recuerdos, me informan que el Área de Cultura del Ayuntamiento ha activado el plan ‘Málaga hace historia’, un proyecto planteado con la finalidad de instalar placas conmemorativas –ya se han encargado las primeras 45- en edificios y lugares de la capital en los que acontecieron hechos con relevancia histórica. La edil de Cultura ha confirmado que esta iniciativa se proyecta para favorecer el desarrollo del conocimiento entre los malagueños de su propia identidad: «Entendemos que para que la ciudadanía aprecie mejor el valor de proteger el paisaje conviene señalar a los que hicieron posible mejorarlo con obras de calidad, de ahí el propósito también de señalar edificios concretos». Corroborando estas buenas intenciones divulgativas, habría que proponerle igualmente que diseñara una de estas placas para ubicarla en el dique de levante con la leyenda: «En este lugar alumbrado por la Farola, el pueblo de Málaga logró impedir la construcción de un rascacielos en el puerto que afectaba irreparablemente los confines de nuestra memoria. Gracias, Málaga por defender tu horizonte. Gracias a los amantes de esta urbe por amparar su historia». Así sea.