Opinión | Memorias en blanco y negro

1908

El Madrid, campeón de la Copa del Rey de 1908

El Madrid, campeón de la Copa del Rey de 1908

El octavo año del nuevo siglo XX fue un año bisiesto que daría comienzo un miércoles a tenor de lo establecido el calendario gregoriano y por el cual se rigen nuestros días. Fue el año en el que nació Abraham Maslow, psicólogo estadounidense bien conocido por todos aquellos que estudiamos carrera universitaria en la segunda mitad de los años 90. Aquel año también fue destacado por el nacimiento del famoso director de orquesta austriaco Herbert von Karajan; el del político chileno Salvador Allende, los actores Bette Davis y James Stewart y el empresario alemán Oskar Schindler, quien estaría llamado a convertirse en el salvador de miles de judíos dentro del holocausto nazi.

1908 fue el año en el que William Durant fundaba la General Motors Co y saldría a la venta el Ford modelo «T» creado por Henry Ford. Otro hecho histórico sucedería el 31 de julio con la firma del contrato para la construcción en los astilleros de Belfast del famoso transatlántico llamado Titanic, cuyo coste total ascendió a la escalofriante cifra de 7,5 millones de dólares estadounidenses de la época.

En el plano nacional, destacamos los nacimientos de la popular cantante y actriz Estrellita Castro, el poeta Rafael de León y del político Carlos Arias Navarro, mientras que en el plano luctuoso se lamenta el fallecimiento de Nicolás Salmerón, presidente de la I República Española.

En cuanto a la temática que nos concierne que no es otra que el fútbol de principios del siglo XX, la disputa del Campeonato de España en su sexta edición tuvo un desenlace peculiar. Muchas e importantísimas fueron las ausencias que tuvo el gran torneo por excelencia creado en homenaje al Rey Alfonso XIII, ya que, aludiendo a problemas económicos, no fueron partícipes del mismo el Athletic de Bilbao, el FC Barcelona y el Recreativo de Huelva, entre otros grandes equipos del panorama nacional. Únicamente el Vigo Football Club como campeón gallego, se desplazaría a la capital para disputarse en un único partido la supremacía nacional ante el Madrid Football Club, que venía de ganar de forma consecutiva las tres anteriores ediciones.

El 12 de abril, en O´Donell, campo situado cerca de la antigua plaza de toros y ante más de cuatro mil espectadores que asistieron a la final, se disputó el encuentro en un terreno de juego que para la ocasión se encontraba en irregulares condiciones debido a las incesantes lluvias caídas en los días previos.

Según cuentan las crónicas de la época y bajo una correcta actuación del colegiado del envite, el Sr. Ávalos, fue un partido muy disputado, aunque la gran pegada de un experimentado Madrid resultaría determinante para lograr el triunfo final.

Antonio Neyra en el primer tiempo y Federico Revuelto en la segunda mitad, adelantarían a los madrileños con dos tantos de diferencia, que únicamente serían contrarrestado ya en el tramo final del choque por el delantero vigués Adolfo Posada. El vencedor y por cuarta edición consecutiva, fue el Madrid FC, al ganar por 2-1.

La publicación Gran Vía y en su crónica del partido, vendría a decir lo siguiente:

«Dada la señal por el árbitro, señor Ávalos, salieron los de Vigo, demostrándose pronto la superioridad del Madrid. Casi todo el tiempo estuvo el juego en el campo del Vigo, y aunque los de este equipo se defendieron bravamente, no pudieron evitar un goal que marcó Neyra en la primera mitad del partido. En el segundo tiempo atacaron los de Vigo con más brío, consiguiendo llevar el juego al campo del Madrid, pero fueron rechazados, y el Madrid se apuntó un segundo gol. Continuó el juego y el Vigo consiguió un gol, que fue muy discutido por los jugadores del Madrid, pero que el árbitro dio como bueno, por entender que Lindsay había parado el balón estando ya dentro. Terminado el tiempo reglamentario, queda vencedor el Madrid por 2 goles a 1, y entrando en posesión de la Copa del Rey hasta el año próximo.»

El Madrid Football Club conquistaba su cuarto título de forma consecutiva, todo un hito histórico que ha permanecido a lo largo de los años como una marca inalcanzable, de hecho, hoy en día, el conjunto merengue sigue ostentando el récord de victorias consecutivas más de ciento trece años después.