Opinión | El Palique

El Rey no come bien

Gente comiendo en el Centro.

Gente comiendo en el Centro. / L. O.

Dice el Rey emérito que hay amigos que le han dado la espalda. Eso después de que sepamos que hay amigos que le han dado dinero. En Francia ha salido un libro en el que una periodista hace jugosas revelaciones sobre el monarca. Juan Carlos casi no puede andar pero le queda jugo dentro. No faltan voluntarios para sacárselo.

Decía Azaña que la mejor forma de guardar un secreto en España era publicarlo en un libro. Pero en Francia leen más y además van y lo cuentan así que están los programas patrios mañana y tarde anunciando secretos del monarca, hábitos del monarca y el monarca para allá y para acá, cuando en realidad está más para allá y lo que quiere es volver a España. Podría. No hay ninguna orden de búsqueda contra él. La biografía de Juan Carlos sale cuando él está escribiendo su páginas más amargas. Eso sí, si le da por llorar, sus lágrimas caen al suelo de su mansión de lujo allá en un lejano país. Las penas con casoplón son menos. Algunos medios anuncian que podría visitar España fugazmente. No va a ser profeta en su tierra pero sí turista. Entre las grandes exclusivas del libro francés, figura una obviedad: el Rey echa mucho de menos la comida española. Podrá tener un cocinero particular muy versado en huevos rotos pero, claro, nada como ir a comerlos a Casa Lucio. Un buen amigo le ha mandado un jamón. Ten amigos para esto. A la mayoría de nosotros cuando estamos en apuros en vez de un jamón nos mandan un whatsapp. Al emérito le tienen en más estima en algunos países que en el suyo, cosa que les suele pasar a los reyes y a los quesos.

Un avezado locutor rompe el silencio de la mañana diciendo que con el libro de la periodista gala saldremos ganando todos, pero yo barrunto que la única que va a ganar dinero es ella. Quizá fomente la lectura en España, aunque sea de gente ávida de cotilleos y no de lírica o buena prosa. Quién sabe. No es inteligente juzgar un libro a la ligera. Ni a un rey.