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Derechos digitales

El pasado 26 de enero, la Comisión Europea publicó dos documentos de enorme interés para nuestro futuro como ciudadanos de Europa. En primer lugar, la Formulación de una Declaración Europea sobre los Derechos y Principios Digitales para la Década Digital. Y en segundo lugar, la propuesta de Declaración, que debe ser proclamada solemnemente por la Comisión, el Consejo y el Parlamento Europeo.

La formulación defiende una transformación digital centrada en las personas (recuerden lo que está pasando con la banca, o con la administración pública electrónica), que debe ajustarse a los valores y las leyes europeas. Es decir, apuesta por un modelo propio que no es ni el de Estados Unidos (desregulado) ni el de China (controlado por el Estado y el partido único). Dice también esta formulación que los principios digitales enunciados en la Declaración se conciben como conceptos esenciales, basados en valores comunes europeos, y que sirven de guía para un entorno digital centrado en el ser humano, seguro, inclusivo y abierto, donde no se deje a nadie atrás.

Respecto a la Declaración, se trata de un documento de siete páginas que está compuesto por ocho considerandos y seis grandes capítulos: las personas en el centro de la transformación digital; solidaridad e inclusión; libertad de elección; participación en el espacio público digital; seguridad, protección y empoderamiento; sostenibilidad. Cada uno de estos capítulos aborda cuestiones de interés, problemas que ya han aflorado: desde la necesidad de realizar un esfuerzo en educación digital hasta el tema del consumo de energía derivado de la digitalización, pasando por la protección de los niños y jóvenes, la defensa de la privacidad o la transparencia de los algoritmos y la justicia de las decisiones basadas en sistemas de inteligencia artificial. No es el futuro, es ya el presente.

En España, poca gente conoce, y casi nadie ha leído, la Carta de Derechos Digitales, aprobada en julio de 2021, y elaborada por un grupo de expertos de la máxima garantía. Sería prolijo citarlos a todos, pero es de justicia reconocer que se ha hecho un buen trabajo. La Carta española recoge cuatro grandes grupos de derechos: de libertad; de igualdad; de participación y de conformación del espacio público; y del entorno laboral y empresarial. También un apartado de derechos digitales en entornos específicos y otro de garantías y eficacia. Los tres documentos citados se pueden leer en castellano. Es importante hacerlo.