«El éxito de la Reforma Laboral está en nuestras manos»

Este es el mensaje lanzado por el presidente de los Graduados Sociales de Málaga y Melilla Juan Fernández, en todos los foros profesionales.

Y es que el colectivo es muy consciente de que tiene que desarrollar una importante labor pedagógica entre empresarios y trabajadores para mejorar y modernizar el tejido productivo en España. “Seamos sinceros. El 90% de los despidos que llegan a la jurisdicción social son por contratos en fraude de ley. Europa ya nos ha sacado los colores por los índices de precariedad laboral. Debemos cambiar esta mentalidad y defender la estabilidad en el empleo”, afirma Fernández.

Un nuevo reto que se suma a la larga historia de desafíos afrontados por el colectivo desde su creación por el Ministerio de Trabajo en 1925, año de publicación del Real Decreto por el que se dispuso la puesta en marcha de una Escuela Social y del nacimiento de las Relaciones Laborales en España. Aquí los Graduados Sociales forjaron los cimientos de una sociedad moderna y de un lema, su lema “Justicia Social».

95 años después, los Graduados Sociales regresan a la primera fila para salvaguardar el empleo y la paz social ante la pandemia de la covid-19. El Ministerio de Trabajo vuelve a reclamar a los Graduados Sociales para tramitar los ERTES y paliar la incertidumbre económica que llega con la grave crisis sanitaria que vive el planeta.

Una vez más, los Graduados Sociales, solos, asfixiados por la presión y sin ayuda afrontan diligentemente y con valentía uno de los episodios más caóticos por los que ha pasado este oficio desde su creación. Cumplen lo encomendado y consiguen que la salud económica de las familias sobreviva y no se hundan los mercados.

95 años después volvemos a la primera fila para mantener el equilibrio económico y social de España, revitalizando la esencia de la profesión, la Justicia Social.

Y no solamente eso, el Ministerio ha aceptado dos de las propuestas que el colectivo de Graduados Sociales ha venido reclamando desde el inicio de la pandemia.

Ahora, el RDL 32/2021, con 54 páginas, busca la simplificación de los procedimientos en los ERTE y facilitar el trabajo a la hora de comunicar el inicio y la finalización de los períodos de suspensión o reducción durante un ERTE.  La nueva DA cuadragésima segunda regula: “el SEPE y la TGSS establecerán un procedimiento único a través del cual las empresas puedan comunicar, a ambas entidades, el inicio y finalización de los períodos de suspensión temporal de los contratos de trabajo y reducción temporal de jornada de trabajo de los trabajadores afectados por un expediente de regulación temporal de empleo”. Nuestro colegio, en varias ocasiones había trasladado que el sistema de comunicación de jornadas reales (actividad agraria) que existe en la TGSS podría ser un ejemplo a seguir para simplificar el trabajo.

Por otro lado, desde la implantación de los ERTE a raíz del COVID 19, y en relación con la devolución de las exoneraciones de cuotas cuando las empresas incumplen la garantía del mantenimiento del empleo, desde el colectivo se solicitaba que dicha devolución, se produjera respecto de la persona despedida en lugar de afectar a toda la empresa. Consideramos que obligar a la empresa a devolver las exoneraciones aplicada a todos los trabajadores, era una medida desproporcionada.

La DA trigésima novena, en su apartado 10, señala que: “las empresas que incumplan este compromiso deberán reintegrar el importe de las cotizaciones de cuyo pago resultaron exoneradas en relación con la persona trabajadora respecto de la cual se haya incumplido el requisito, con el recargo y los intereses de demora correspondiente”.

Sin lugar a duda, el trabajo realizado por el Consejo General ante el Ministerio y la DG de la TGSS ha dado sus frutos, y estas dos reivindicaciones del colectivo, han sido atendidas por medio del nuevo RDL 32/2021 que entra en vigor el próximo 30 de marzo.

De este modo, y concluyendo, al igual que los Graduados Sociales estuvimos al servicio del Ministerio para revolucionar las relaciones laborales a partir de 1925 (8 horas de jornada, descansos, cobertura sanitaria, prohibición del trabajo infantil…) ahora casi 100 años más tarde somos garantes del nacimiento de la primera Reforma Laboral consensuada de nuestra historia basado en la estabilidad del empleo por medio del contrato estable e indefinido como eje vital.

Llegados a este punto, como podrán ver, seguimos caminando hacia la Justicia Social de la mano, una vez más de los Graduados Sociales.

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