Opinión | Memoria en Verde y Morado

Regreso a los orígenes

Imagen de la plantilla del Gran Canaria de 1996.

Imagen de la plantilla del Gran Canaria de 1996. / A Aro Pasado

Más allá de las ilusionantes incorporaciones realizadas, estoy convencido que una de las mejores noticias del verano para la afición claretiana ha sido el retorno de Sitapha Savané para asumir el puesto de presidente del club. Savané es una leyenda deportiva (poseedor de varios registros históricos en la amplia trayectoria ACB del equipo) y todo un referente social gracias a su implicación en la sociedad grancanaria. Cerca de su sexagésimo aniversario, el club fundado en el patio del colegio del Claret quiere recuperar la mágica conexión que se vivía en las gradas del Centro Insular de Deportes. La llegada de un ídolo como Savané me ha hecho recordar a un trío de jugadores esenciales en el desembarco del Granca en la máxima competición nacional a mediados de los 90.

Pepón Artiles, el más veterano de los tres, tuvo primero que emigrar para hacerse un jugador respetado en la liga EBA, por entonces competitiva 2ª categoría del baloncesto nacional. Su frustrado fichaje por el Mayoral Maristas de Imbroda y Ramírez, le llevó al club de su isla para convertirse en el héroe de la llegada a la ACB. Pepón asumía los galones ofensivos en un plantel lleno de jóvenes locales, llevándole a ser elegido como el mejor jugador de la fase de ascenso celebrada de Gijón. En la liga nacional, su rol cambió. Como buen líder se adaptó para ofrecer al equipo aquello que más necesitaba y, bajo las órdenes de Manolo Hussein, Artiles pasó a convertirse en un consumado especialista. Rebotes y sacrificio, Pepón representaba el rol de «camión de la basura» aportando intangibles de gran valor.

Uno de los beneficiados de esa labor de intendencia era Santi Toledo. Con su calidad y fundamentos técnicos, Toledo era un fino estilista de 2,11m. Polivalente y dotado de buena mano, Santi fue uno de los primeros interiores capaces de salir de la zona y jugar de cara al aro. Mientras su compañero y amigo Pepón era pura energía, Toledo tenía un carácter mucho más tranquilo, como dicen por allí «aplatanao». Esa calma le convertía en un valor diferencial. Años después, Toledo y Artiles fueron de los primeros españoles en beneficiarse de la ‘Ley Bosman’ con una brillante carrera en Portugal.

El tercer integrante era Berni Hernández. Alto para su posición (1,90), Bernardo ejercía de cerebro del equipo desde muy joven. Siempre pensando en el colectivo por delante de las individualidades, Hernández no brillaba por la velocidad ni por su lanzamiento, pero manejaba el tempo del partido como nadie y ejercía un liderazgo incuestionable. El magnífico trío de extranjeros del Gran Canaria (Morton, Burditt y Vandiver) rendía al máximo nivel siempre bajo la batuta de Berni. Cotizada pieza en el mercado nacional, únicamente el derecho de tanteo ejercido por el Gran Canaria le impidió recalar un verano en el Unicaja. Después de abandonar la isla, Berni tuvo una longeva y exitosa carrera en la ACB, destacable sobre todo en las filas de un Lucentum Alicante que disputó una apasionante y recordada eliminatoria de cuartos de final contra Unicaja el año que ganamos la liga.

Es curioso que este trío solo coincidieran sobre el parquet en uno de los cuatro encuentros disputados contra Unicaja durante las dos temporadas en las que compartieron vestuario. Fue en marzo de 1996, en los minutos finales de un plácido partido para los cajistas, el entrenador del Granca los puso en pista para cerrar un encuentro en el que la calidad malagueña y el ambiente en Ciudad Jardín dejó sin opciones al equipo amarillo. Como bien recuerda el propio Hernández, la rivalidad se quedaba dentro de la cancha pues lo más normal era que ambas plantillas coincidieran tras el partido en algún garito de moda del Centro (Tita Conchi, Dos Caballos o Doctor Funk) .

Pepón, Santi y Berni son historia del básket canario. Tres tipos que representan los orígenes de un club que busca recuperar la comunión con su animosa afición.

La Peque – Columna (por Simón RJ): ¡Sabías qué Berni Hernández y Santi Toledo son los respectivos tíos de Lucas Langarita (estrella de la selección sub-17) y Santi Aldama (jugador de los Memphis Grizzlies de la NBA)?