Memoria en Verde y Morado

Actor protagonista

José Antonio Díaz, jugador del Breogán.

José Antonio Díaz, jugador del Breogán. / L. O.

Juanma Rodríguez

Juanma Rodríguez

Tras el gran éxito internacional de la película «Garra» (producida por Adam Sandler y Lebron James) que narra la experiencia de Bo Cruz, el álter ego de Juancho Hernangómez, me han venido a la memoria otras producciones cinematográficas en las que el baloncesto español tiene un papel más o menos relevante.

En «La familia y uno más» de 1965 hay una escena en la que se disputa un partido entre las selecciones de Madrid y Cataluña. Cuando el equipo catalán está montado en su autobús, Aíto García Reneses tiene su momento de gloria con un par de frases con cierta retranca desde la ventanilla (https://youtu.be/iCl0xxqtFEA)

Más reciente es la participación de toda la plantilla del Estudiantes en la premiada «Campeones». Su participación se produce en el momento que desencadena el conflicto clave del personaje encarnado por Javier Gutiérrez, un entrenador amargado que se ve obligado a dirigir a un equipo muy especial que termina conquistando a todos los espectadores (https://youtu.be/UCZ1WLfWWhc)

Pero el actor protagonista que quiero hoy reseñar es José Antonio ‘Tito’ Díaz, inolvidable jugador del Breogán de Lugo. Junto a Jimmy Wright y el resto de compañeros, Díaz tuvo su papel en «La vieja música» (https://youtu.be/fP-OruK_AG0), filme dirigido con Mario Camus.

La película, rodada en 1985, cuenta la historia de un entrenador uruguayo sin demasiada experiencia (Federico Luppi) que recala en Lugo y mantiene como ayudante al anterior entrenador (Antonio Resines), a la vez que pone todo su empeño en aprender a base de vídeos y libros. Más allá del baloncesto, su verdadera motivación es reencontrarse con un antiguo amor (Charo López). Tito fue intérprete ocasional en esa película pero ha sido y es protagonista principal en la historia del baloncesto lucense. Díaz representa la figura del base clásico de los años 80. Figura clave en la consolidación del basket en Galicia, destacaba por una inteligencia privilegiada frente a sus limitadas condiciones físicas.

Gran conocedor del juego (a nivel táctico y mental), dirigía con acierto y sobriedad al conjunto breoganista. Junto a Manel Sánchez formaban una magnífica dupla plenamente identificada con un club que iba a alcanzar sus mayores éxitos con el liderazgo y la referencia de Tito.

En octubre de 1989, Díaz encabezó la magistral actuación de su Breogán que eliminó de la Copa del Rey a un Caja de Ronda que por entonces lideraba como invicto la ACB. Rotunda victoria por 21 puntos en Ciudad Jardín y mínima derrota por 1 en Lugo, en un partido que casi arruina la trayectoria malagueña por la fuerte discusión que se produjo entre Mario Pesquera y Rickie Brown, dos tipos con mucho carácter.

Entrañable para sus amigos, típico producto «Galicia Calidade», tras su retirada, Tito ha seguido vinculado al baloncesto gallego, primero como entrenador y ahora como director general de un brillante Breogán. Su experiencia y habilidad para moverse con acierto en todos los ámbitos donde se juega nuestro deporte (vestuario, directiva, políticos o agencias de representación) le confieren un plus muy valioso a su tarea actual.

La Peque-Columna (Simón R.J.)

¿Sabías que Veljko Mrsic, entrenador del Breogán, ganó la Copa Korac en 2001 jugando con el Unicaja?