Cartas de los lectores

Diego Sánchez Bolsa

INCENDIOS FORESTALES

Inmersos ya en la primavera y ante las primeras altas temperaturas que son más propias del próximo verano -tal como sucede cada año- han aparecido en nuestro país los primeros incendios forestales.   Porque, cierto es que ocasionan un fuerte impacto en la flora y fauna de las zonas afectadas siendo harto difíciles de recuperar a corto plazo, que los suelos al verse desprovistos de vegetación sufren una gran erosión, y que los ríos quedan contaminados por el arrastre de las cenizas.   Además, habida cuenta de que la mayoría de estas catástrofes son provocadas por el ser humano -como la reciente entre Teruel y Castellón- y cada vez afectan a mayores extensiones de monte, se hace absolutamente necesario que se tomen las medidas oportunas para evitarlos o, al menos, reducirlos, a la mayor brevedad posible.   Y es que, aparte de la urgente modificación de la ley actual -entre otros- hay que dotar de más medios humanos y económicos y mejorar las condiciones de trabajo de los bomberos forestales, revisar y reparar el estado de los tendidos eléctricos, y ¡ojo! prohibir terminantemente las barbacoas y fuegos para revertir esta gran lacra social tan peligrosa.