Tribuna

Ahora te toca a ti

Patronal y sindicatos firman el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC)

Patronal y sindicatos firman el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) / SERGIO PÉREZ

Fernando Muñoz Cubillo

Fernando Muñoz Cubillo

Con el V Acuerdo Nacional de Empleo y Negociación Colectiva (AENC) firmado este miércoles, 10 de mayo, entre las organizaciones patronales y sindicales, se pone fin a la creciente pérdida de poder de compra de millones de personas trabajadoras.

Se trata de una herramienta que permitirá trabajar en cada sector o en cada empresa, los contenidos de esos convenios colectivos enquistados, paralizados, en algunos casos desde hace mucho tiempo. Por tanto, la capacidad demostrada por las partes para llegar a acuerdo, debe extenderse como ejemplo para que las patronales malagueñas de los diferentes sectores o las empresas se sienten con la representación sindical y trasladen los contenidos del mismo a cada convenio, o a cada empresa, y son unos 150 los convenios en la provincia de Málaga cuya vigencia ya ha finalizado. Estos convenios afectan a alrededor de unas 200.000 personas, a quienes se les van a mejorar de forma inmediata sus condiciones laborales. Además, el mismo va a beneficiar también al resto de personas asalariadas en esta provincia, que suman otras 300.000.

La patronal CEOE y CEPYME se ha cuidado y mucho de limitar la participación del Gobierno de España, en períodos preelectorales, pero debemos recordar que el 6 de febrero del 2012 también se publicó en el BOE el II Acuerdo Económico para la Negociación Colectiva (AENC), que apenas tuvo una vigencia real de 30 días, pues el Gobierno electo del Partido Popular (PP), presidido por Mariano Rajoy, lo suprimió de manera inmediata con unas modificaciones legislativas «muy duras». En palabras de su ministro De Guindos, «de manera fulminante», y sin un mínimo diálogo con la representación sindical.

Hoy, la mayor amenaza para este acuerdo vuelve a ser el PP, con un líder, el señor Feijóo, desorientado ante las actuaciones y propuestas que sus barones y baronesas están presentando públicamente. Un presidente en Castilla y León que permite el desmontaje de los servicios extrajudiciales de conflictos (SERCLA), o una presidenta de la Comunidad de Madrid que jalea a su líder nacional para que derogue todas las reformas del actual Gobierno de España, o por último, un presidente andaluz que ha sabido sentar y acordar en Andalucía un pacto social y económico para el Impulso de Andalucía, con los mismos agentes sociales firmantes de este V AENC.

Por eso, en este acuerdo se recoge igualmente un artículo para el refuerzo de los sistemas de solución autónoma de conflictos laborales. Porque el diálogo es condición imprescindible para poder acordar los términos del texto y su contenido. En estos momentos, este acuerdo nace con un espíritu de transversalidad política: gobierne quien gobierne, el acuerdo debe prevalecer. Y el diálogo social demostrado para llegar a él, también.

Las condiciones laborales que deben hacer iguales a mujeres y hombres en las empresas, los derechos de las personas con diversidad funcional, el relevo generacional en el empleo, la no discriminación de personas LGTBI, la adecuación tanto de conocimientos como de nuevas formas de organización en las empresas, los procesos de digitalización, de nuevas tecnológicas, las transiciones energéticas y medioambientales, la regulación de quienes trabajan a tiempo parcial o fijos discontinuos. En definitiva, garantizar la seguridad en el empleo y mejorando la cualificación profesional de las plantillas, entre otros, son contenidos que se tratan en este V AENC y que deben trasladarse a todos y cada uno de los convenios colectivos.

Por eso, desde CCOO decimos que «ahora te toca a ti», ahora es el turno para que las representaciones sindicales y las empresas se sienten y acuerden, pero también es el turno para que los diferentes gobiernos de nuestro país no se pongan de perfil. Para que este acuerdo se pueda desplegar en todo su articulado, se requiere de la acción del Gobierno, no sólo de España en primer lugar, sino de los gobiernos de las comunidades autónomas y de los ayuntamientos.

Podemos afirmar que la obligación de nuestros gobernantes es legislar conforme a este gran acuerdo, un mandato constitucional que las organizaciones empresariales y sindicales más representativas de nuestro país, al amparo del artículo 7 de la Carta Magna, así se lo piden, aunque a algunos representantes políticos públicos les cueste aceptar y acatar este artículo, como vimos en el 2012.

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