Un manotazo en Vietnam

Vaya con la fontanera, o lo que sea Leire, que no está muy claro todavía. Pero intentar desacreditar, dejémoslo ahí, a la Guardia Civil, al tet. col. Balas de la UCO y otros que molestan al boss, tiene bemoles. Sin embargo, lo más preocupante es que la pillen y la fotografíen, así no se puede trabajar, porque ella, en realidad, lo que estaba haciendo era escribir un libro, dice, y que es periodista, como algunos que alternan sus trabajos de redacción con el agitprop del almuerzo. Y, encima, le dimite a Marlasca el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez; ahora bien, Francisco Martínez, otrora del PP, es detenido en la (operación) Borraska.

Lo hablamos en Alaparte, entre fideos y unas deliciosas carnes de campaña con un Tanuki Bob de Mallorca que descubrimos. Eso sí, la camarera no da abasto, y que llegue la cafetera al bistró, porfa, no digo ya los licores.

Hombre, tampoco podíamos olvidarnos de Miguel Ángel Gallardo, que debería presentarse a los campeonatos de España de atletismo, por lo que ha corrido para aforarse. Ahora, si el señor Gallardo hubiese mantenido la palabra que empeñó en enero –«no tengo que salir corriendo a una institución para aforarme»-…, pero por la boca muere el pez. Sus hechos le transparentan, se le ve todo. ¿No buscamos transparencia en la vida pública?, hela aquí, en versión extreme(ña).

Pero hay que ocuparse de la entrada en vigor, el 12 de marzo, del nuevo real decreto de subvenciones en cooperación, que se ha presentado como un hito de modernización administrativa destinado a simplificar trámites. Pero tras esta apariencia de eficiencia tan inocente se ocultan cambios que erosionan gravemente los mecanismos de control y transparencia, ya verán ustedes como sale rana.

Cosa distinta es la del cocinero José Andrés, que critica el actual sistema de reparto de alimentos en Gaza y exige uno en el que palestinos alimenten a palestinos, es decir, Hamás, que así era antes de que los israelíes les quitaran los pingües beneficios de su tráfico con las necesidades de los demás. Es como si él, español, solo pudiera alimentar españoles en sus más de veinte restaurantes de EEUU y no norteamericanos.

Ya aterrizados aquí, en el aeropuerto de Málaga, o en el Madrid, los políticos, muy valientes ellos, no se atreven a desalojar a los indigentes de las terminales donde duermen, no vaya a ser que les acusen de Dios sabe qué. Es la otra censura. AENA, ayuntamientos, comunidades, todos siempre tan eficientes en el cumplimiento de los deberes que, eso, se les suponen.

Y en estas, Brigitte parece que hace justicia y le da un manotazo al presidente Macron en el avión -liberté, égalité, fraternité- antes de desembarcar en Hanoi, Vietnam, donde cometieron algunas atrocidades las tropas galas en su época colonial. Años antes, deportaron en suelo francés a más de 75.000 judíos a su muerte durante el Holocausto. Los metieron a la fuerza en vagones de ganado desde el Vel d’Hiv mientras los parisinos miraban. ¿Y después de la guerra?, pues pelillos a la mar, o palabras vacías, que es lo mismo. Hoy, las cosas son distintas, apuñalan a los judíos en las calles de la France y las sinagogas tienen vigilancia militar. Bueno, y no supieron defender a la Republique de un puñado de yihadistas, y ahora quieren decirle a Israel cómo debe ser una guerra frente a los que usan escudos humanos. Aquí, en Madrid, ocurrió algo parecido, el 11M de 2004, hubo 192 muertos mientras que en Gaza y Cisjordania Hamás y Al Fatah salían a la calle para celebrarlo e Israel ofrecía ayuda a España, por eso hoy el presidente se lo agradece, que es de justicia. Pero también es verdad que hay muchos perros mudos, soñadores acostados y amigos de dormir, como decía el profeta Isaías. Mientras, la oposición más flower power de la historia española, se prepara para un congreso de una profundidad ideológica que pasa por la promesa de Feijóo de no aceptar postulados de Vox, ¡ni de Junts!, espero que tampoco de Bildu, puestos en ese plan. Don Ramón María del Valle-Inclán fue muy claro al respecto:

Es la hora de los enigmas,

cuando la tarde del verano,

de las nubes mandó un milano

sobre las palomas benignas.

¡Es la hora de los enigmas!

Es la hora de la paloma:

sigue los vuelos la mirada

de una niña. Tarde rosada,

musical y divina coma.

¡Es la hora de la paloma!