Ya se oye. El viento trae el tenue sonido de una campana. Escucha, escucha, que ya suenan los tambores y las cornetas. ¿No lo hueles? El romero y el incienso impregnan el aire. Ya se ve la luz de las velas a lo lejos, allí, al fondo de la calle. ¿De verdad que no notas el temblor del suelo con los pasos de 200 hombres de trono, caminando al mismo son? Pero seguro que ahora ya puedes oír el tintineo del palio, que se mece suavemente. ¿Aún no? Pues acerquémonos más entonces, para que sientas el calor de los cirios y si eso no da resultado aún pues fundámonos con la muchedumbre para corear con ellos. Que ya viene… ¿No? Espera, ¿de dónde me dijiste que eras? Ah, que eres inglés. Entonces coge asiento y ponte cómodo, que voy a hablarte de la Semana Santa de Málaga.