La Consejería de Empleo de la Junta ha informado este miércoles de que la comunidad suma ya 37.363 solicitudes de expedientes de regulación temporales de empleo (ERTE) presentadas por las empresas andaluzas, con un 47% de aumento sobre los datos del martes. La ratio de trabajadores por expediente es de 7,5, así que el cálculo es que hay ya unos 280.000 empleos afectados en la comunidad.

En la provincia de Málaga, donde ayer se computaban algo más de 4.700 expedientes, el volumen ha crecido en un día un 50,7% y sitúa el total en 7.122 peticiones, lo que englobaria a más de 53.000 trabajadores, según señalaron fuentes de la Consejería.

Sevilla es la provincia con más ERTE con 8.300 expedientes, seguida de Málaga, Cádiz (6.959), Córdoba (3.797), Granada (3.282), Almería (2.973), Jaén (2.618) y Huelva (2.312). De momento, no hay datos por sectores.

Por otro lado, el sindicato CCOO en Málaga ha querido mostrar su "preocupación" con la aplicación del

"silencio administrativo positivo" como forma de aprobación de los ERTE que se están presentando con motivo de la crisis del Covid-19.

"Esta forma de resolución de los procedimientos supone que si la administración no responde al interesado en el plazo previsto en la norma, se entiende de facto que la resolución es positiva, es decir, que se aprueba el ERTE. En la práctica esto supone dar luz verde a expedientes de regulación temporal de empleo que casi no se han podido revisar y que podrían contener aspectos perjudiciales para los trabajadores y trabajadoras, judicializándose los mismos a posteriori según los casos", ha explicado la central.

Según el secretario general de CCOO en Málaga, Fernando Cubillo, a consecuencia de la emergencia sanitaria los plazos se han reducido a solo cinco días, a lo que se une que en Málaga "hay apenas 16 personas" dedicadas a validar los expedientes presentados en la provincia.

"Se trata de una situación que hace muy difícil que la totalidad de los expedientes puedan disponer de un informe favorable o desfavorable basado realmente en el análisis de la documentación, con lo que pueden pasar desapercibidas irregularidades o inexactitudes dañinas para los intereses de la plantilla o de parte de ella, como pudieran ser los fijos discontinuos o eventuales", ha añadido.

Cubillo ha explicado que cada responsable debe tramitar los expedientes en "tiempo record", por lo que ha considerado necesario un refuerzo de las plantillas en la delegación de Empleo.

"Los derechos de los trabajadores desempleados, eventuales, fijos-discontinuos, etc€ pueden verse conculcados por mero silencio administrativo. Esto nos obliga a defender estos derechos ante la Inspección de Trabajo, ante la delegación de Empleo y posteriormente ante los tribunales ocasionándoles un perjuicio a las empresas por una actitud negligente, por incapacidad de la administración andaluza en su tramitación", ha aseverado Cubillo.

Para CCOO, los ERTE, como garantía para el mantenimiento del empleo, "necesitan de un riguroso control administrativo y de una intervención sindical sobre la concurrencia de fuerza mayor así como de las causas invocadas y la proporcionalidad de las medidas".

Por todo lo expuesto, el sindicato ha reiterado la necesidad de reforzar las plantillas tanto en la delegación de Empleo de la Junta de Andalucía como en la propia Inspección de Trabajo que, además, "debe llevar a cabo la vigilancia por los incumplimientos en las empresas relativos a los riesgos por contagios del COVID-19".