­El Sepulcro presentó ayer los ciriales propios que precederán, por primera vez, al trono del Señor a partir del próximo Viernes Santo. El acto, que tuvo lugar en el salón de tronos de la casa hermandad, fue presentado por el periodista y cofrade Santi Souvirón, además de contar con la presencia de los artistas y artesanos que han participado en su elaboración y una capilla musical de la banda de la Esperanza, que interpretó diversas obras.

La nueva adquisición patrimonial permitirá contar, por primera vez en la historia de la hermandad, con ciriales propios en la sección del Señor, precediendo al trono, fuente de inspiración de la que ha bebido Eloy Téllez para dar forma a esta obra de arte, en la que han intervenido artistas de renombre como el imaginero José María Ruiz Montes, el orfebre Emilio Méndez, el tallista Manuel Toledano y los artesanos de los talleres Granda de Madrid, además del propio Téllez.

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«Los ciriales anteceden al trono del Señor y, por tanto, están formados por los mismos materiales: madera, bronce y esmalte», explica el diseñador de las piezas, Eloy Téllez, quien añade que de los hachones del Cristo nace esta composición. Entre los motivos ornamentales hay estrellas y cabezas de león.

«Una obra muy compleja»

El orfebre Emilio Méndez asegura que «es una de las obras más complejas» a las que se ha enfrentado, porque en un momento llegó a tener ante sí más de un centenar de piezas. «Es una responsabilidad muy grande, por la hermandad de la que se trata y por plasmar en la realidad la obra de Eloy Téllez».

Precisa Méndez que, conforme se han ido acoplando esas piezas de bronce, «mejor quedaba el trabajo». «En cada inglete, en cada vuelo de relieve se ha jugado mucho con los abultados de las piezas, se juega también con muchos perfiles y los puntos de diamante».

El imaginero José María Ruiz Montes explica que cada uno de los ciriales -son cuatro- está coronado por tres capillas que albergan a su vez a tres imágenes de ángeles pasionistas. «La iconografía consiste en que cada ángel lleva uno o varios atributos de la Pasión de Cristo y van dispuestos en orden cronológico», dice, de tal forma que sostienen los siguientes elementos: la columna, el flagelo y la corona, la cruz, el paño de la Verónica y el Inri; los dados y la túnica, los clavos, la caña y la esponja, la lanza, la escalera, las tenazas y los martillos.

«El corte de las imágenes es muy sereno, porque el sello de la cofradía del Sepulcro hunde sus raíces en el siglo XIX», dice, y señala que Eloy Téllez le ha dado libertad para crear los ángeles a su libre albedrío. «El proceso ha sido dibujar, modelar en barro y la terminación es en bronce con un baño en oro muy suave», precisa.

Ejecución del cuarto de esfera

El tallista Manuel Toledano apunta: «Nos hemos encargado de la labor lignaria de los ciriales, que hemos ejecutado en madera de caoba, siguiendo las indicaciones de Téllez. Lo más curioso, sin duda, lo debemos observar en la planta de estos cuatro ciriales. Realmente no es nada común ver en la arquitectura clásica las plantas con números impares de capillas o edículos», señala, y agrega: «La tarea más dificultosa ha sido la ejecución del cuarto de esfera que remata el fondo de cada una de las capillas».

Todas las piezas, indica, fueron ahuecadas interiormente hasta donde la estabilidad y la seguridad han permitido a efectos «de no añadir excesivo peso al conjunto por lo que a la madera se corresponde». Toledano alaba «los quilates artísticos» de las figuras ejecutadas por Ruiz Montes, lo que otorga a la obra que todo el conjunto del cirial «sea digno de contemplación el próximo Viernes Santo».

La cofradía de la calle Alcazabilla usaba precediendo al Señor, hasta ahora, ciriales de la hermandad de la Santa Cruz, con la que existe una gran amistad. Éste es un proyecto que ha culminado el actual hermano mayor, Emilio Betés, y que fue iniciado por uno de sus predecesores en el cargo, José María Souvirón.