La insistente lluvia de la mañana de ayer obligó a suspender el traslado de los titulares de la Sagrada Cena desde los Mártires hasta su casa hermandad. Aunque retrasó la decisión lo más que pudo, finalmente se optó por un traslado privado en dos andas muy sencillas a las 16.00 horas. El Señor de la Cena iba con túnica lisa y la Virgen de la Paz, de hebrea con manto negro bordado.