El cuadro de 'Los desposorios de la Virgen', obra de Cornelio de Vos (siglo XVI) ha regresado a San Julián tras ser sometido a un intenso trabajo de restauración a cargo del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), situándose en el lateral de la Epístola de la sede de la Agrupación de Cofradías.

Los trabajos de restauración han permitido limpiar el lienzo y recuperar los colores del óleo en las zonas que se conservan de lienzo, muy dañado en los sucesos ocurridos en los años 30. Además se han recuperado las lagunas gracias a una antigua fotografía en blanco y negro, hallada décadas atrás por Agustín Clavijo. Esta imagen ha permitido completar el volumen de la obra tras la sustitución del soporte anterior por uno realizado en bosquejo, al igual que el resto de las zonas originales.

El cuadro se ha reintegrado en el lateral de la Epístola de San Julián, donde se debía ubicar por deseo de Luis de Godoy, miembro de la primitiva Hermandad de la Caridad, que donó la obra a dicha corporación el 14 de julio de 1697, tal y como defendió en su tesis doctoral (2010) el cofrade Andrés Camino.

El presbiterio de San Julián también ha recibido una talla de Santo Tomás de Aquino donada por el pintor Manuel Mingorance Acién en 2011. El artista y conservador benalmadense Francisco Naranjo ha sido el responsable de su restauración, tras un laborioso proceso de desparasitación, limpieza y reintegración polícroma.