Los rondeños no dan crédito a lo que está pasando en el seno de la cofradía del Ecce Homo en los últimos años, que ve peligrar su salida procesional del Jueves Santo por falta de personas para participar en la procesión. Un antiguo problema interno ha dividido profundamente a los hermanos en dos facciones, haciendo peligrar su salida procesional en la próxima Semana Santa de Ronda.

Las graves y continuas desavenencias en la hermandad rondeña, que se han agravado notablemente en los últimos meses, entre los dos grupos de la Antigua y Venerable Hermandad de Nuestro Señor Ecce-Homo "Señor de la Escala", Cristo de la Buena Muerte y Nuestra Señora del Buen Amor de Ronda obligaron a la Diócesis de Málaga a intervenir la hermandad y nombrar a Luis Candelas como comisario para gestionar la cofradía e intentar resolver las diferencias entre los dos grupos de hermanos. Candelas, cofrade y expresidente de la Agrupación de Cofradías, cuenta con una notable experiencia.

El comisario comenzó a trabajar a través de la palabra como herramienta para que ambas partes se reconciliaran: "Lo que pretendo es mantener la vida de la hermandad este año y de alguna manera mediar entre ellos. Que se perdonen lo ocurrido en el pasado", relata el comisario Luís Candelas, además pregonero de la Semana Santa rondeña de 2017.

La primera toma de contacto con las dos facciones fue a través de una reunión para "conocer la opinión de cada una de las partes". A ella sólo se presentaron 28 personas de 30 necesarias para el quórum, según sus estatutos. "No íbamos a tomar ninguna decisión, pero me esperaba más personas", recuerda Candelas que está y ha estado manteniendo reuniones contantes con ambas partes.

El mediador hizo un primer llamamiento a los hermanos para participar en la procesión de la próxima Semana Santa a través de los medios de comunicación locales, "en el que me contestaron unos 70 hermanos que eran prácticamente adolescentes, que son por los que merezca la pena seguir trabajando. Pero con niños no podemos poner una procesión de esta envergadura en las calles de Ronda".

La segunda llamada ha sido a través de cartas postales y correos electrónicos destinados a cada uno de los más de 500 hermanos para que contestarán si estaban dispuestos a participar en la procesión del Jueves Santo. El 10 de febrero a las doce de la noche fue el día tope para responder al ofrecimiento de reconciliación del comisario, de las que “he recibido 143 respuestas desde la hermandad, en las que están incluidos todos los miembros de la junta anterior y una sola respuesta desde la asociación”, detalla con cierta pena Candelas.

El comisario designado por el Obispado de Málaga, junto con el consiliario, trabaja con la esperanza de encontrar una solución justa “para la hermandad, la asociación y el pueblo de Ronda”, para que esta Semana Santa la cofradía del Cristo de la Buena Muerte haga su estación de penitencia. Tal es la confianza de Candelas que “ya he hecho las gestiones con el Tercio 'Alejandro Farnesio' IV de la Legión y está dispuesta a acompañar a los sagrados titulares como estos años atrás. Pero no estoy dispuesto a montar los tronos sin tener las garantías de los propios hermanos de la cofradía y contar con el tiempo necesario que requiere la organización de una procesión”, destaca.

Los capataces de los tronos han trasladado al mediador que tienen los hermanos suficientes para, al menos, asumir la procesión del paso del Cristo y la Virgen.

Origen del conflicto

Origen del conflictoEl origen del problema parece que se encuentra en los años 80, cuando la cofradía compra un inmueble para destinarlo como casa hermandad. En las actas del cabildo consta que el comprador es la propia hermandad, pero terminan registrando la casa hermandad a nombre de una asociación cultural que fue creada paralelamente a la hermandad con el nombre de Ecce-Homo.

Durante varios años estas dos organizaciones se entendieron hasta que las directivas de ambas entidades cambian y es cuando llegan las desavenencias. La hermandad termina dependiendo económicamente de la asociación y esta última, en los dos últimos mandatos, ha cortado el fluido económico en gran medida haciendo a la hermandad prácticamente dependiente de la asociación.

Este es el desencadenante de una situación límite entre el grupo de personas que defiende a la asociación y otros a la hermandad, que con los años ha ido “in crescendo” hasta llegar a diferencias personales entre estos rondeños, que en un tiempo pasado estaban unidos bajo un mismo paraguas.

La asesoría jurídica del Obispado de Málaga estudia la legalidad del registro de la casa hermandad a nombre de la asociación Ecce-Homo, porque se ha usado una norma civil y obteniendo un efecto distinto del que pretende esa norma. Aunque la asociación hizo un documento de cesión a la hermandad sin reservarse el uso de la sede.