La empresa de limpieza Limasa recurrirá al uso de campanas de alta presión para retirar la cera que queda adherida al suelo en las calles por las que discurren los recorridos procesionales de LimasaSemana Santa. Con este fin, ha adquirido recientemente dos campanas, que se incorporarán a las otras dos con las que ya cuenta el servicio, y que se dedican habitualmente a la limpieza de las aceras más sucias.

El concejal del Área de Sostenibilidad Medioambiental, Raúl Jiménez, explicó ayer que este dispositivo sustituirá al empleado el año pasado con el mismo fin, que se servía del uso de un producto químico rociado en la calle antes del recorrido de cada cofradía para eliminar la adherencia de la cera y facilitar su limpieza posterior con un baldeo.

El edil señaló asimismo que el uso de la campana a presión este año permite actuar también con una gran eficacia, evitando al mismo tiempo los problemas de resbalones y deterioro de túnicas que se produjeron el año pasado y por el que Limasa ha tenido que pagar 8.000 euros de indemnización a la Agrupación de Cofradías.

Según señaló Jiménez, este operativo actuará a diario al finalizar el recorrido procesional en la zona oficial, para ampliar su campo de acción una vez finalizada la Semana Santa.

Limasa emplea las campanas de alta presión en el mantenimiento del acerado desde el pasado mes de septiembre. Según Jiménez, en estos meses «tanto la empresa como la propia ciudadanía han podido comprobar la eficacia de su trabajo, debido al elevado nivel de limpieza que logran, por lo que cuentan con gran aceptación».

Una de las campanas trabaja proyectando agua a 450 atmósferas de presión, mientras que la otra baldea a menor presión, unas 150 atmósferas, pero con agua a una temperatura entre 80 o 90 grados.

Por otro lado, Limasa movilizará esta Semana Santa un dispositivo especial destinado a reforzar los servicios de limpieza de la ciudad, a fin de responder adecuadamente a las necesidades de la ciudad durante estas fechas. La empresa reforzará todos sus servicios durante estos días con el objetivo de atender las zonas en las que se prevé mayor afluencia de personas y actos, así como las calles que forman parte de los recorridos procesionales. De igual modo, durante estos días once operarios se encargarán diariamente del reparto de bolsas en las zonas de sillas y tribunas, en concreto 100.000.