La Virgen de la Victoria ya está en la Catedral. Desde anoche. Vivirá un mes de mayo histórico, para conmemorar dos importantes aniversarios: los 150 años de su patronazgo sobre la diócesis (1868) y los 75 de su coronación canónica (1943). Estos actos culminarán el próximo 26 de mayo con una procesión magna para exaltar a la patrona con la participación de las otras nueve imágenes de la Virgen que están coronadas canónicamente en la ciudad. Una cita cofrade de primer nivel, que está despertando una gran expectación no solo en Málaga, sino en otras provincias andaluzas y españolas.
El traslado desde el Santuario se produjo ayer a partir de las 17.30 horas y por un itinerario muy novedoso, para permitir que la imagen recorriera distintas calles del barrio que va a dejar huérfano durante algo más de un mes. De este modo, la presencia de la imagen llegada a Málaga con los Reyes Católicos en 1487 se hizo notable en entornos inéditos del Altozano o Las Lagunillas. Y con el acompañamiento de la banda de música de la Expiración, vinculada a la hermandad de la Victoria desde 1993 (en la Magna acompañará a la Virgen de los Dolores de la Expiración, archicofradía a la que pertenece). Calles de su barrio que habitualmente no puede transitar el 8 de septiembre, dado el carácter oficial de la comitiva patronal.
El cortejo, compuesto fundamentalmente de hermanos que portaban cirios, pasó en su itinerarios por las casas hermandad del Rocío y del Monte Calvario, donde la Virgen de la Victoria fue recibida con honores.
La imagen fue procesionada sobre sus andas de traslado, las mismas que la hermandad utiliza cada año para llevarla a la Catedral, en rosario de la aurora, en las vísperas de su novena de septiembre. El exorno floral estaba compuesto por profusión de flores en distintos niveles, alrededor de la Virgen. Amarilis, tulipán doble, oriental mini, astroemerias blancas, spiders, orquídeas, alelíes, flor de cera, margarita stallion, clavel, jacintos, hipericum y azucenas de María, todo en color blanco. A sus pies, una media luna cedida por la archicofradía del Socorro de Antequera.
Estancia en la Catedral
Durante el mes de mayo, la Virgen de la Victoria se situará en el baldaquino del altar mayor de la Catedral para recibir las visitas y a los grupos de peregrinación (de devotos, arciprestazgos, cofradías y hermandades, colegios...) El 26 de mayo participará en la procesión magna y, tras volver al primer templo, presidirá el paso de todas las Vírgenes desde el atrio de la Encarnación.
