La procesión del Corpus Christi, que ha vuelto este año al horario de mañana tras años de itinerario vespertino, ha recorrido este domingo las calles del Centro de Málaga bajo un sol radiante y acompañada de numeroso público durante todo el trayecto. El cortejo ha partido a las once de la mañana de la Catedral tras la celebración de la Misa Estacional, que ha sido presidida por el obispo de Málaga, Jesús Catalá. La impresión es que el recorrido matutino ha beneficiado a la celebración del Corpus, al unir la Eucaristía con la procesión del Señor Sacramentado, aunque es evidente que a esta fiesta le sigue faltando tirón popular.

El Santísimo ha estado acompañado por la banda de Zamarrilla y por un cortejo procesional con representación de las hermandades y cofradías de Pasión (organizadas por orden de salida) y de Gloria, y las hermandades sacramentales con un pequeño tramo de velas, seguidas de las cruces de los distintos arciprestazgos de la ciudad, la Adoración Nocturna, la Congregación de los Santos Patronos o la Hermandad de la Victoria.

A continuación marchaban los seises, justo por delante de los seminaristas de la Diócesis, diáconos y una representación del clero malagueño. Le seguía el cabildo catedralicio y el obispo de Málaga, que caminaba delante de la carroza con Cristo Sacramentado. Tras ella, el numeroso pueblo congregado en esta mañana dominical. En la procesión han participado también muchos niños vestidos de comunión acompañados por sus padres. En medio del cortejo marchaba la Banda Municipal de Música.

El itinerario ha estado jalonado por varios altares en los que el cortejo se ha detenido para proclamar pasajes de la Sagrada Escritura y diversas oraciones. El primer altar estaba situado en la fachada principal de la parroquia del Sagrario de la Catedral, a cargo de la hermandad de Humildad y Paciencia, y con una imagen de Santo Tomás de Aquino. La procesión ha enfilado la calle Santa María, donde se ha producido un parón de unos quince minutos debido a la presencia de unos cables de luz que impedían el paso de la carroza. Solventado el problema, el cortejo ha continuado por Sánchez Pastor y calle Granada hasta llegar a la plaza de la Constitución, donde estaba instalado el altar oficial de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa con la custodia de la iglesia de los Santos Mártires.

El recorrido ha proseguido por la calle Larios, girando a la altura de la calle Strachan y saliendo al Postigo de los Abades. Allí aguardaba el altar instalado por la Cofradía de la Cena, presidido por la imagen del Señor. A continuación se ha subido por la calle Cañón hasta Císter, donde en el cruce se ha situado el último de los altares del recorrido, con la imagen de la Virgen de la Sierra (que está en la iglesia de Santiago). El altar ha estado organizado por esta hermandad, filial de la Archicofradía de la Patrona de Cabra (Córdoba).

La presencia cofrade ha sido nutrida. Cada hermandad iba representada por su junta permanente de gobierno. Mena y Misericordia han sido las hermandades de Pasión con presencia más numerosa (alrededor de doce personas cada una). La Agrupación de Cofradías de Semana Santa estaba encabezada por su presidente, Pablo Atencia.

En la Misa Estacional, que ha comenzado a las 9.30, el obispo de Málaga ha destacado la importancia de la Eucaristía como centro de la vida de la Iglesia y la necesidad de que la caridad presida el quehacer de los cristianos. Catalá ha recordado que el Corpus coincide con el Día de la Caridad, en la que la colecta recogida se destina a Cáritas bajo el lema "Tu compromiso mejora el mundo". Cáritas Diocesana celebra precisamente este año su 50 aniversario.