La Congregación de Mena ha solicitado la medalla de la ciudad de Málaga al Ayuntamiento de la capital para La Legión española, con motivo del centenario fundacional de esta unidad de elite del Ejército de Tierra que se conmemorará durante este año.

La cofradía ha enviado una carta firmada por el hermano mayor, Antonio de la Morena, dirigida al alcalde, Francisco de la Torre, en la que se insta al Consistorio a la concesión de esta distinción a la fuerza castrense.

Una decisión que, a propuesta del hermano mayor, la junta de gobierno de la Congregación aprobó por aclamación semanas atrás, coincidiendo con las labores de ayuda que La Legión ha realizado con la población en Andalucía, y más concretamente en Málaga, durante la pandemia del COVID-19, han recordado en un comunicado.

La Legión española está vinculada a la Congregación de Mena desde finales de los años veinte del siglo XX, siendo su titular, el Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Ánimas, el Protector Oficial de este cuerpo militar. De hecho, participa en los actos que organiza la cofradía durante la Semana Santa, además de mantener un estrecho vínculo con los congregantes durante todo el año.

En este punto, han señalado que la Legión ha estado a disposición de la ciudad "en muchas vicisitudes de su historia reciente, como su colaboración en varias inundaciones, especialmente la que provocó el desbordamiento del río Guadalhorce en el año 1989, cuando por entonces la sede del Mando de La Legión (MALEG) estaba incardinada en el Campamento Benítez, además de las unidades que se desplazan en la actualidad en diversas labores de apoyo desde el acuartelamiento del IV Tercio 'Alejandro Farnesio', situado en Montequejaque (Ronda)".

Asimismo, han añadido "goza del notorio y manifiesto cariño de los ciudadanos malagueños, muchos de los cuales han integrado sus filas históricamente, quienes a buen seguro apoyarán esta iniciativa". En este sentido, han recordado el afecto de la ciudadanía cuando las unidades de la Legión "participan o protagonizan actos en la ciudad, siendo los casos más destacados" los del desembarco en el Puerto y el traslado del Cristo de la Buena Muerte y Ánimas la mañana del Jueves Santo y la posterior procesión por las calles durante la noche de la misma jornada.