Las bandas de Málaga se han unido con el objetivo de pedir al Ayuntamiento ayuda económica para poder mantener su actividad en un año muy complicado para estas formaciones, tras la suspensión de la Semana Santa a causa de la pandemia de Covid-19. Las procesiones son su principal fuente de ingresos. El dinero que reciben por sus actuaciones, se destina al pago de alquileres de locales de ensayo, uniformidad, arreglo o adquisición de instrumentos y sueldo de profesores. El coronavirus ha dejado en una situación muy delicada a la mayoría de estas bandas, ya que, en el mejor de los casos, han podido cobrar el 50% del contrato.

La Agrupación de Bandas de Música Procesional de Málaga ha encontrado en esta situación un motivo más que justificado para reactivarse e incorporar hasta a 18 formaciones de la ciudad. El colectivo está integrado por entre 1.500 y 1.800 músicos, la gran mayoría de ellos jóvenes.

Su actual presidente, José Vela, recuerda que la institución nace en 2013 a raíz, principalmente, de los problemas de muchas bandas de cornetas y tambores para poder seguir ensayando en la calle, como era tradicional, tras la aprobación de la nueva ordenanza de ruídos. Este lunes, los responsables de las bandas han tenido una reunión en el palacio de San Julián, sede de la Agrupación de Cofradías, para ratificar los acuerdos alcanzados en las últimas semanas con los directores de las distintas formaciones musicales de la ciudad y sumar nuevas bandas a la Agrupación. "Ahora todos tenemos problemas", reconoce Vela.

Ya no solo de orden económico. También de falta de actividad, ya que las medidas de seguridad que hay que aplicar impiden que, en muchos casos, se puedan llevar a cabo los ensayos con normalidad. "Y sin estos, es difícil mantener el compromiso de los músicos y la supervivencia de las bandas", señala. "Queremos aunar esfuerzos y empezar a pedir ayuda a las instituciones. Queremos presentar al Ayuntamiento un borrador de convenio de colaboración para establecer un calendario de actividades de las bandas en los distritos, a cambio de una ayuda económica", explica el presidente de las bandas malagueñas, que recuerda que los músicos de estas formaciones ejercen su labor de manera completamente altruista.

"Tenemos que reivindicar nuestro colectivo porque somos importante para la cultura malagueña y estamos enraizados en la tradición de la ciudad", insiste. "Deberíamos tener algún tipo de asignación anual, como ocurre en otras ciudades, llevando a cabo algún tipo de contraprestación", precisa Vela, que pone como ejemplo la disposición de las bandas a actuar a cambio en eventos significativos de la ciudad, como el Festival de Cine o la llegada, las vísperas del Corpus o la llegada o salida de grandes cruceros en el puerto.

También solicitarán dispensas temporales a Medio Ambiente para que las bandas puedan volver a ensayar al aire libre, posiblemente en patios de colegios, mientras sean obligatorias las medidas de distanciamiento social para evitar la propagación del Covid-19, y para que todos los músicos puedan tocar juntos, ya que hasta ahora se han podido retomar estos ensayos por secciones o cuerdas.

Conciertos en los distritos

El área de Juventud del Ayuntamiento de Málaga ya ha dado un primer paso en ese sentido y ha propuesto la creación de un circuito de conciertos por los distritos a partir de la segunda quincena de septiembre, a cambio de una prestación económica de mil euros por banda. El concejal, Luis Verde, mantuvo este pasado jueves una reunión con los responsables de las bandas para ofrecer esta colaboración que ha sido bien acogida, para amortiguar los efectos de la pandemia.