El Mutilado ya está en Málaga y volverá a presentarse al culto el próximo 3 de octubre. Así lo ha comunicado la hermandad a través de sus redes sociales. Será en un acto en la Catedral, una misa estacional a partir de la cual la imagen, además, recibirá la denominación de Cristo de la Clemencia, nueva advocación aprobada por el cabildo de hermanos celebrado este martes. El crucificado, atribuido a Jerónimo Gómez de Hermosilla en el siglo XVIII para el ático del retablo del altar mayor de la iglesia del Sagrario, ha estado desde junio de 2019 y hasta este domingo en el taller del profesor Juan Manuel Miñarro, en Sevilla, que ha intervenido de forma decisiva en la imagen, a la que ha repuesto las piernas.

El propio Miñarro cuenta cómo ha sido este laborioso proceso, que también se ha visto ralentizado en última instancia por el decreto de Estado de Alarma de la pasada primavera.

Lo más evidente, como es lógico, es la restitución de las extremidades inferiores que el Cristo perdió en el asalto a su sede canónica durante los primeros días de la Guerra Civil en 1936. Los hermanos de la cofradía del Cristo del Mutilado y la Virgen de la Divina Providencia dieron un paso histórico el pasado mes de enero de 2018, aprobando en cabildo por amplia mayoría (44 a 8 votos) la restauración de la imagen, que les permitirá en el futuro, como es su deseo, cumpliendo con los requisitos impuestos en el Obispado, volver a salir en procesión, ya que la última fue en 1977.

Para realizar la nueva pierna derecha y el nuevo pie izquierdo, tanto Miñarro como sus colaboradores han precisado de apoyo tecnológico. En concreto, generaron un modelo digital en 3D del Cristo para hacer las correcciones oportunas y hallar las proporciones adecuadas. "Hay que tener en cuenta que la imagen se ejecutó, en origen, para coronar un retablo a más de diez metros de altura, por lo que el artista supo cómo conseguir la perspectiva, haciendo las piernas y el torso más largos, los brazos más cortos y la cabeza más pequeña. Si el Cristo se coloca a nuestra altura se nota, pero en alto, se compensa", explica el profesor Miñarro, que señala que también se ha basado en tablas anatómicas y en estudios de antropólogos físicos. "De este modo, hemos calculado los segmentos que había que reconstruir". Escanearon la imagen e incluso construyeron un modelo con una impresora 3D.

En primer lugar digitalizaron el Cristo sin piernas con el escáner 3D de mano EinScan Pro 2x PLUS de Shining 3D. Tras realizar varios estudios basados en esculturas de la época, crucificados del siglo XVII y un estudio anatómico de su cuerpo y miembros, procedieron a realizar el trabajo del modelado del pie izquierdo, ya que era el que se encontraba en mejor estado.

La empresa Sicnova publicó este mes de agosto en su página web un estudio sobre el éxito de estos trabajos realizados con la imagen del Mutilado y publicó algunas fotografías del proceso.

La reposición de la pierna y el pie se ha llevado a cabo "siguiendo criterios de restauración". Es decir, "respetando el fragmento de lo que quedó y dándole continuidad". De hecho, se trata de una actuación reversible. "No es cuestión de estar quitándole y poniéndole las piernas continuamente", dice Miñarro, pero de otro modo "la imagen dejaría de ser el Mutilado y perdería su carga histórica". El profesor pone de ejemplo cualquier vasija romana que se restaura y se expone en un museo y el visitante puede apreciar qué parte es antigua y cuál se ha repuesto en una internvención posteior. De este modo, a una distancia "de culto", se identifican perfectamente las partes. De hecho, queda una línea insinuada, una mínima junta, pero visible.

El taller ha utilizado un mecanismo interno de acero inoxidable (macho y hembra), con un anclaje pivotante de cuarto de vuelta para unir los fragmentos que se le han incorporado. Los planos de ensamble no han sufrido nada, ya que el Cristo fue dañado por estas zonas que eran perfectamente geométricas y ha facilitado no tener que retocar la madera antigua. "Hemos realizado muchas pruebas", señala Miñarro, que ya empleó este mismo sistema, por ejemplo, en la imagen del Cristo de la Misericordia de Málaga, en concreto, en el brazo derecho que se apoya en la piedra. "En esta ocasión, el plano es más grande y está a la vista, por lo que la dificultad es mayor", explica.

Para la policromía, Miñarro ha imitado las texturas para que no haya una discordancia muy visible. De lejos, no se nota absolutamente nada. "De hecho, quien no conozca la historia de este Cristo, puede llegar a pensar que lo hemos hecho entero", sostiene.

Lógicamente, las nuevas extremidades es lo que más va a llamar la atención. Pero la intervención ha sido más profunda. Durante cuatro meses y medio el taller ha estado practicando una limpieza de la imagen. Los ensambles de los brazos también han sido resanados porque se encontraban en mal estado. También se ha tenido que actuar en el sistema de sujeción del crucificado a la cruz, ya que hasta ahora tenía tres puntos y pasa a tener cuatro.

La historia del Mutilado

En julio 1936, recién declarada la Guerra Civil, el Cristo por entonces ubicado en el ático del retablo de la iglesia del Sagrario, fue profanado, perdiendo la pierna derecha de la imagen a la altura del muslo y el pie izquierdo por el tobillo.

Tres años más tarde se convirtió en la imagen titular de la Cofradía Nacional del Santísimo Cristo Mutilado, creada en febrero de 1939 con la finalidad de integrar a miembros del bando franquista que habían sufrido mutilaciones en la contienda fratricida española.

La cofradía, que tenía un carácter militar y procesionista, salió por primera vez el Jueves Santo de 1939 y dejó de tener actividad procesionista en 1977.

Esta restauración supone un avance en la normalización de la hermandad, que ya en 2016 incorporó la Virgen de la Divina Providencia y está acometiendo un importante proceso de restauración de su patrimonio.

Hasta ahora, la cofradía sólo realiza un vía crucis en los jardines de la Catedral el Viernes Santo. Con la restauración de la imagen, la hermandad podría reincorporarse a la Agrupación de Cofradías, como es su deseo, y salir en el recorrido oficial. Aunque hasta 1977 salía el Jueves Santo, la cofradía ya ha dejado claro que está dispuesta, de darse el caso, de asumir un cambio de día.