Vía Crucis

El Santo Suplicio cumple en su encuentro con su barrio

La imagen cumplió con su vía crucis en la parroquia de la Amargura y recorrió las calles vecinas de vuelta con la AM San Lorenzo Mártir

Salida del Santo Suplicio desde el interior de la Ermita de Zamarrilla.

Salida del Santo Suplicio desde el interior de la Ermita de Zamarrilla. / Eduardo Nieto

Miguel Ferrary

Miguel Ferrary

La cofradía de Zamarrilla comienza la Semana Santa quince días antes que el resto. La salida del Santo Suplicio para rezar el vía crucis en la parroquia de la Amargura es uno de esos momentos que galvaniza a la cofradía y la pone en marcha, como un recordatorio anual de que el futuro estará en el Jueves Santo.

Este cortejo es austero, con la imagen del Santo Suplicio reinando por encima de cualquier otro elemento. Su imponente figura y su expresividad invitan a prescindir de todo lo superfluo en favor de la imagen. La ida se hizo con sencillez, acompañada por el cuarteto de clarinetes de la banda de la cofradía. Lo hizo casi con premura, para vivir el vía crucis en la parroquia con la intimidad e importancia que requiere. Una túnica lisa de color granate y flores moradas servían para realzar la imagen de Palma Burgos.

Acólitos acompañan el cortejo del Santo Suplicio.

Acólitos acompañan el cortejo del Santo Suplicio.

La Agrupación Musical San Lorenzo Mártir le acompañó en el recorrido de vuelta, ya con otro tono y un público curioso que buscaba a esta imagen. las marchas permitieron lucirse a los portadores y animar a los vecinos a acompañar el cortejo. Quizá, más pronto que tarde, será por las calles de Málaga.