Pablo Cortés del Pueblo se define a sí mismo como «un intenso de Málaga de toda la vida de Dios». El pintor, nacido en Almería, ha cumplido este año uno de sus sueños: ser el pintor del cartel de la Semana Santa de Málaga 2023. Para ello ha rescatado el cartelismo suntuoso, que tiene como protagonista a la Virgen del Amor en la calle Císter, a la Catedral de Málaga y a su hermana Marina, la pequeña de la familia, vestida de mantilla. El título del cartel es ‘Los lirios que vienen del sur’, nombre que le puso su amigo Javi, que cuando lo vio, según las palabras de Cortés del Pueblo, dijo: «Es que es un cartel para que la gente de fuera de Málaga venga a la Semana Santa». «Mi tía siempre me dijo que yo tenía un monstruo dentro que algún día iba a estallar. No era normal que un niño dedicase todo su tiempo libre a pintar».

Pablo Cortés recuerda con emoción el día en el que le contaron que iba a ser el cartelista de este año. «Gonzalo León es muy amigo mío y llevábamos intentado quedar dos semanas, y me dijo que el once de octubre teníamos que quedar sí o sí. Le dije que me venía fatal, pero él insistió. Ese día me vine de la cofradía para mi casa con dolor de cabeza a esperar a que llegara Gonzalo. A los dos minutos de entrar en mi casa pegan en la puerta de nuevo. Eran Pablo Atencia (presidente de la Agrupación de Cofradías) y mi hermano mayor, Ramón Varea (hermano mayor de El Rico). En ese momento me olí qué podía pasar».

En esa conversación con Pablo se podía palpar lo que significa para él ser el pintor del cartel de la Semana Santa de Málaga. Parecía que estaba reviviendo el momento en el que se lo comunicaron de nuevo, allí en su salón de casa. «Empecé a sudar al ver a Atencia. ¡Yo no tenía relación con él!, y por la fecha que era ya pensaba qué podía ocurrir. Se me apagó el cerebro y no era capaz de pensar. Solamente decía qué cara pongo yo a partir de este momento».

En esa tarde del once de octubre, a Cortés del Pueblo, además de darle la noticia de su vida -como él la llama- también le dijeron que no podía decírselo a absolutamente nadie en dos semanas. Momento en el que Atencia lo comunicaría a la Agrupación de Cofradías y se trasladaría a los medios de comunicación. «Aguanté las dos semanas callado. Ni a mi familia, ni a mi novio. A nadie. A mi pareja se lo conté diez minutos antes de que saliese la noticia. Ese día estaba desesperado y me fui a escuchar misa un miércoles por la tarde a Santiago».

La Semana Santa de la ilusión

Algo que se ha repetido mucho durante esta Cuaresma es que se pretende que la Semana Santa de 2023 sea la de la ilusión. «A mí me dijeron que querían devolver la ilusión a los malagueños por la Semana Santa. Entonces yo en ese momento pensé: ¿quién soy yo para devolverle la ilusión a nadie? Supe que tenía que hacerle ilusión a todos los cofrades. Soy malagueño y cofrade, le voy a dar a la gente lo que yo esperaría que me dieran a mí».

Pablo Cortés del Pueblo, autor del cartel de Semana Santa 2023.

Cartel lleno de simbolismo

Como bien dice Cortés del Pueblo, es un cartel que incluye a todos los malagueños. Los elementos más destacados son la mujer vestida de mantilla abrazada a unos claveles rojos, la Catedral y la Virgen del Amor, titular del Rico. «Mi hermana Marina es mi musa y tenía que estar ahí. Cuando mi sobrina pequeña identificó a mi hermana al ver el cartel me morí de amor. Ella hace el gesto de que está loca. Se puso delante del cartel y lo hizo».

El pintor tenía claro que la Virgen del Amor tenía que estar. «Si no la pinto yo, ¿quién lo va a hacer? Hay imágenes que tienen más devoción dentro y fuera de Málaga. Pero es mi gran devoción, para mí es lo más grande. En Málaga se le quiere mucho, pero no es el Rocío, no es la Zamarrilla...»

Ha explicado que el cartel se ha llevado «una parte de él para el resto de su vida». «Es un sentimiento muy bonito que no he tenido con otros carteles, con otras obras; aunque esos también los he vivido con mucha ilusión».

Uno de los elementos que el pintor tenía en mente al principio era que la calle San Agustín o la curva del Gálvez fuesen los protagonistas. Finalmente, la elegida fue la calle Císter. «Esto fue porque Borja me dijo que por qué no ponía Císter que es mi calle favorita y pasamos por ahí. Me puse a investigar, vi que no había salido en ningún cartel oficial y dije olé, claro, la calle de mis amores, mi calle Císter». «La cara de mi hermana es muy folclórica. ¿A qué se va a abrazar Málaga si no es al Cautivo? Me parece muy puro el simbolismo de los claveles rojos al pecho trinitario. Quería representar a Málaga con rollo coplero, antiguo, porque es la que a mí me inspira. Ella mira a la Luna como el cofrade que mira a la Semana Santa».

Flores

El cartel tiene una flor por cada cofradía. Cortés del Pueblo ha explicado que empezaron siendo mera decoración, y que después, pensó en meter flores que representasen a Málaga. El romero de la Esperanza, uvas de Viñeros , rosa roja de Zamarrilla y la espiga de la Santa Cena, entre otros, inundan el cartel de la Semana Santa de Málaga de 2023.

«A mí me encanta la sensación que se siente cuando un trono se va a altas horas de la noche y está la calle llenísima de gente. Estás rodeado de familia, de gente que conoces y felices. Yo creo que esa bulla es la que representa el sentimiento de un friki cofrade como yo y quería eso en mi cartel. En esa bulla hay caras representativas, un poco por mostrar a la gente que hace la Semana Santa de Málaga. A que cuando mañana, dentro de muchos años, se vea este cartel y la gente sepa quiénes hacían la Semana Santa en Málaga».

«Lo mejor de esto para mí ha sido el proceso. Que tu trabajo sea levantarte para pintar el cartel de la Semana Santa de Málaga es maravilloso. Me podía tirar 15 horas pintando». El pintor describe el proceso como un viaje: «Es un viaje que hemos hecho el cartel y yo. Me he dejado mucho llevar por el cartel y ha sido precioso».

Un cartel celebrado

Pablo ha contado a La Opinión que cuando le enseñó el cartel terminado a Atencia, Gonzalo Otalecu y Gonzalo León, Pablo Atencia decía: «No puedo parar de mirarlo». Reconoce que al final tuvo momentos de pánico: «Solo pensaba en cómo irme de Málaga. La mañana de la presentación lo veía feo, horrible. Estaba saturado de cartel y necesitaba que terminase ya. Mi madre se metió conmigo en la cama y me dijo que cómo no me iba a gustar, que era precioso. Me mimó mucho. Me hizo el cafelito y todo». «Me gusta que la gente haga sus lecturas. Ahí es cuando la obra ya no es tuya y es de la gente. La interpretan como quieren. Algo que ha nacido de lo más profundo de ti, ahora es de todo el mundo. Lo están agradeciendo».