Hoy en día, las llaves inalámbricas de los coches modernos emiten constantemente señales hacia ellos. Debido a esto, los expertos avisan de que los ladrones de estos vehículos pueden obtener una llave inalámbrica original y utilizarla para abrir el coche que ellos quieran replicando el código de acceso.

Para evitar que esto suceda, una manera muy sencilla que existe es envolver las llaves del coche con papel de aluminio. Así lo consideran algunos expertos en ciberseguridad, ya que es la forma más simple y barata que existe.

El director general de la agencia de ciberseguridad GuardKnox Cyber Technologies, Moshe Shlisel, explicó para la BBC que mediante el papel de aluminio se origina una celda que sirve para evitar que cualquiera pueda grabar las ondas electromagnéticas de la llave.

"Estamos hablando de una forma de comunicación a través de ondas electromagnéticas, como la radio o la televisión. Piensa en una canción que constantemente se use entre una radio y una cerradura que se abre al escuchar esa canción. Si conozco la canción, puedo abrir tu cerradura", comentó Shlisel sobre cómo los ladrones logran robar de ese modo los coches.

En cuanto a la cantidad de robos llevados a cabo con esta técnica, Shlisel dijo que "estos incidentes suceden cada vez más", puesto que "los dispositivos que se necesitan para cometer estos ataques se pueden comprar fácilmente en internet y hasta existen tutoriales en YouTube sobre cómo hacerlo". También agregó que "la industria automotriz está completamente al tanto de estos problemas y busca la manera de que sea imposible que alguien pueda replicar la comunicación entre una llave y un vehículo".