La esperanza de vida de los europeos sigue aumentado pero la obesidad y el sobrepeso de una proporción creciente de la población amenazan con invertir esta tendencia, advirtió la Organización Mundial de la Salud (OMS) en un informe publicado el miércoles.

El último 'Informe sobre la salud en Europa', publicado cada tres años, establece que el "bienestar" registrado en el continente es "el más elevado del mundo" aunque sigue siendo "muy variable de un lugar a otro de la región", que incluye 53 países tan diferentes como Rusia y Andorra, Alemania y Turkmenistán.

La esperanza de vida en el momento de nacer se elevaba a 77,8 años en 2015 en el conjunto de Europa, frente a 76,7 años en 2010.

La esperanza de vida de las mujeres (81,1 años) sigue siendo superior a la de los hombres (74,6 años) en seis años y medio, una diferencia que se redujo ligeramente.

Pero las disparidades son importantes según los países: los hombres viven casi 16 años más en Islandia (81,4) que en Kazajistán (65,7 años).

En España, la esperanza de vida al nacimiento es de 85,5 años para las mujeres y 80,1 años para los hombres.

"Los avances son desiguales, tanto dentro de los países como entre países", subrayó Zsuzsanna Jakab, directora de la OMS para Europa.

Y lanzó una advertencia: "Los factores de riesgo ligados al modo de vida son preocupantes, pueden frenar o incluso invertir los progresos importantes de esperanza de vida si no se hace nada".

Obesidad y sobrepeso

Entre estos factores está el sobrepeso, que aumenta el riesgo de diabetes, cáncer o enfermedad cardíaca, está "en aumento en la mayoría de Estados", alerta el informe. En 2016, la obesidad y el sobrepeso afectaban respectivamente a 23,3% (+2,5 puntos en seis años) y 58,7% (+2,8 puntos) de la población.

El aumento es particularmente destacado en Turquía, donde casi 4 de cada 10 mujeres (39,2%) son obesas.

Para la OMS, una persona sufre obesidad cuando presenta un índice de masa corporal (IMC) superior a 30, cifra que se obtiene dividiendo el peso en kilogramos por el cuadrado de la estatura en metros. Por ejemplo una persona de 1,70 metros es obesa con 87 kilos.

Malta (28,9% de la población) y Reino Unido (27,8%) son los otros dos países de la región que presentan los peores resultados en este campo. En España, el porcentaje es de 23,8%, superior a la media de la Unión Europea (22,9%).

El informe señala asimismo el consumo de tabaco y alcohol, cuyos datos en la región Europa están entre "los más elevados del mundo": 29% de los individuos de más de 15 años fuman, frente a 16,9% en las Américas y 24,8% en el sudeste asiático.

Este porcentaje asciende a 43,4% en Grecia, 39,5% en Rusia y 30,3% en España, según las estimaciones de la OMS en 2013. Sin embargo, la proporción de fumadores diarios disminuye entre la población de los 53 países, pasando de 28,1% en 2002 a 24,4% en 2014.

El consumo de alcohol, al alza en los años 1990 y 2000, retrocede con regularidad desde 2008 pero sigue siendo elevado en comparación con otras regiones del mundo, situándose en 8,6 litros por persona en 2014, frente a 6,4 l/p en el mundo.

En la Unión Europea en 2014, el consumo más elevado se registró en Lituania (15,2 litros/persona), República Checa (12,7 l/p) y Bélgica (12,6 l/p). Con 9,3 l/p en 2013 (no hay datos disponibles para 2014), España llega por detrás de la media de la UE (10,1 l/p).

Baja la mortalidad por cáncer

Por otra parte, las cuatro principales enfermedades no trasmisible causan menos muertes prematuras.

Así, la mortalidad ligada al cáncer, la diabetes, las enfermedades respiratorias y las cardiovasculares retrocedió un 9% entre 2010 y 2015 (715 fallecimientos por 100.000 habitantes ese año).

Sin embargo, la incidencia de estas afecciones sigue en aumento: en la UE, el número de nuevos casos de cáncer detectados cada año aumentó un 5% entre 2010 y 2014, para alcanzar los 569 casos por 100.000 personas.

Por último, la OMS pinta un paisaje desigual en lo relativo al establecimiento de una cobertura sanitaria universal. Según los países, el porcentaje del gasto que los pacientes pagan de su bolsillo es muy variable: en Francia en 2014, el gasto en salud de los hogares representaba un 6,3% del total, frente a 16,7% en el conjunto de la UE, 24% en España y 45,8% en Rusia.