La situación de las urgencias en los hospitales madrileños sigue mejorando, pero algunas UCI continúan con un ritmo frenético: "No queda una cama libre más de unas horas", cuenta a Efe el Jefe de Servicio de Cuidados Intensivos del madrileño Hospital Universitario Puerta de Hierro, Juan José Rubio.

El doctor considera que no se pueden "distinguir fases", como si hubiéramos superado lo peor de esta crisis. "Es pronto; dicen que sí, que están las UCI mejor, pero creo que son más las ganas que tenemos, porque la mejoría es mínima", añade el responsable de la UCI del Puerta de Hierro, hospital que ha abierto sus puertas a Efe para mostrar su trabajo en esta fase de la pandemia del coronavirus.

Según explica, en general las UCI de los hospitales madrileños están todavía "como hace una semana". "Sigue habiendo necesidad de traslados: dos, cinco o diez solicitudes de traslados de un hospital a otro. Los hospitales que tienen una cama libre la ofrecen y se hacen traslados de unas UCI a otras. Nos dura una cama libre unas horas, ya que la ocupa un enfermo de planta o el de otro hospital que está saturado", cuenta.

Rubio relata que la forma de trabajar en los cuidados intensivos ha cambiado "radicalmente" y ahora existen dos UCI: una para los enfermos de la COVID y otra familiarmente llamada UCI limpia. "Ahora el trabajo es agotador", reconoce este médico.

En la Comunidad de Madrid hay 5.800 fallecidos con la COVID-19 y 43.877 contagiados. Según los datos facilitados este jueves por el Ministerio de Sanidad, se han reducido las personas ingresadas en la UCI, con siete pacientes menos en UCI, en total 1.433, mientras que el número de personas hospitalizadas (12.853) cae en 436 pacientes. Además, se han superado las 20.000 altas en la región y ya hay más altas que ingresos.

En el hospital Puerta de Hierro habitualmente hay 20-22 camas en la UCI y otras 20 en la UCI quirúrgica, un total de 40-44 camas, y en esta crisis se han duplicado hasta las 80 camas.

Sin embargo, tanto el responsable de la UCI como la jefa del Servicio de Urgencias, Rosa Capilla, coinciden en que "algo más importante que tener más camas de UCI es tener gente que sepa usarlas", médicos que sepan trabajar con respiradores.

"Lo que hay detrás de estas camas de UCI no lo sabe la gente, no saben lo que supone sacar adelante una sola cama de UCI. Ha habido semanas en las que tener un anestesista era que te tocara la lotería", dice la jefa de Urgencias.

En su caso, sí nota la bajada de la presión asistencial en las urgencias. "Desde el fin de semana pasado vienen menos pacientes con una historia clínica relacionada con la COVID. Ha bajado un poco, pero vienen pacientes por otras patologías que han estado aguantando estas semanas y empiezan a perder el miedo a ir al hospital", comenta.

Por tanto, la doctora ha pedido calma ante el descenso de pacientes con coronavirus en las urgencias ,porque "parece que lo estamos celebrando y es sólo un respiro: esta crisis no ha terminado ni mucho menos".

Un factor que ha contribuido a aliviar las Urgencias del Puerta de Hierro es el seguimiento telefónico y las videollamadas para atender a los pacientes que han sido dados de alta por coronavirus.

Pero el motivo principal por el que las Urgencias están más aliviadas mientras que las UCI siguen con una carga de trabajo elevada es porque, según cuentan los doctores, hay muchos pacientes hospitalizados a los que se les complica la enfermedad.

"Es un virus muy complicado, produce una infección grave. Todavía hay más de 400 ingresados", apunta la responsable de Urgencias del Puerta de Hierro.