Luto en redes

La muerte del 'streamer' Gabriel Chachi rescata la necesidad de vigilar la salud mental

Ibai Llanos, todo un fenómeno de internet, insta a pedir ayuda profesional cuando los problemas nos desbordan

Gabriel Chachi, junto a su novia, en mayo, antes de realizar un test de embarazo en directo.

Gabriel Chachi, junto a su novia, en mayo, antes de realizar un test de embarazo en directo. / YouTube.

Olga Pereda

“Cuidad siempre vuestra salud mental. Pedid ayuda a la gente que os rodea y acudid a un profesional. Sé que a veces es complicado o da vergüenza buscar ayuda y contar los problemas. Pero hay momentos donde es totalmente necesario. Cuidaos mucho por favor”. Ibai Llanos, todo un fenómeno de los videojuegos y las redes sociales, lanzó el pasado martes este alegato a favor de la salud psicológica en su cuenta de Twitter. El mensaje está relacionado con la muerte, según distintos medios, de un streamer con el que el influencer vasco solía colaborar, Gabriel Chachi, catalán de 25 años. Muchos otros youtubers llenaron las redes de tristeza y solidaridad con El rey, como solía llamar Chachi a sus seguidores.

Chachi, que vivía con su abuela en Barcelona antes de ser una estrellita virtual, emigró a Madrid para buscarse la vida, cobrar el paro y currar algunas horas en una hamburguesería. Sin embargo, de la mano de internet, el excéntrico joven se convirtió en autónomo. Mejor dicho, empresario. Así lo comentó hace apenas unas semanas, el 22 de mayo, durante un directo en YouTube en el que invitó a dos 'boomers', dos cepas viejas: sus padres, Gabriel, electricista “raro”, y Dolors, administrativa a la que le gusta estudiar, un “asco de afición”, según comentó entre risotadas el joven youtuber. “Es la vez que más nervioso estoy”, aseguró a sus seguidores delante de sus progenitores.

Con su habitual lenguaje caótico y chabacano, el streamer presentó a sus padres a la audiencia. Ambos se mostraron orgulloso de su hijo. “La aspiración de cualquier padre es que su hijo le adelante”, comentó el padre mientras la madre asumía lo difícil que había sido asumir que Gabriel, su Gabi, emigrara a Madrid para buscarse la vida.

Días antes, el 6 de mayo, conectó en directo con su pareja para para hacerse un test de embarazo tras anunciar que a ella no le bajaba la regla desde hacía dos semanas. “Jódete, Gobierno, no voy a tener hijos”, sentenció el joven mostrando a cámara el resultado negativo.

La presunta muerte de Gabriel y el mensaje en Twitter de Ibai Llanos ha vuelto a poner sobre la mesa el debate de la salud mental, algo que ya ocurrió en el Congreso de los Diputados de la mano de Íñigo Errejón. Las sensatas palabras del representante de Más País, que recordó que cada día se suicidan en España 10 personas y reivindicó la presencia de más psicólogos en atención primaria, tuvieron como respuesta un grito burlón del diputado del PP Carmelo Romero: “¡Vete al médico!” El veterano político pidió disculpas más tardes aunque destacó que se había malinterpretado su comentario.

Hace pocos días, Errejón volvió a poner el dedo sobre la llaga al reivindicar en una entrevista en la SER "la pausa y el aburrimiento" como parte de la vida. No todas las noches tienen que ser como Nochevieja. La vida real no es una story de Instagram”. En su opinión, vivimos unos tiempos tan veloces que lo más transgresor es decir simplemente “normal” cuando te preguntan qué tal. “A lo mejor lo más revolucionario que pueden hacer las nuevas generaciones es apagar el móvil, un instrumento neoliberal de control de nuestro tiempo”, sentenció el diputado. 

Tras conocer la triste noticia de Gabriel Chachi, Twitter se ha llenado de mensajes donde se habla directamente del “suicidio” de la estrella de YouTube y la necesidad de cuidar la salud mental igual que la física porque la realidad que rodea a muchos jóvenes, por más estrellas virtuales que sean, es tenebrosa.