Los arrestos, con los que el instituto armado ha dado por desarticulada a la red, se han producido en el marco de la operación "Sextante", iniciada en octubre del pasado año cuando el equipo de Delincuencia Organizada detectó las actividades de esta banda en el puerto deportivo de Almerimar, en El Ejido (Almería), ha informado hoy la Guardia Civil en un comunicado.

La fase final de esta operación se produjo entre el 20 de junio y 2 de julio, cuando se efectuaron una docena de registros en domicilios y naves industriales de Cabo de Gata, Almería, El Ejido y Adra, todos ellos en la provincia de Almería, así como en Granada y en Pontevedra, en los que los agentes aprehendieron los 3.300 kilos de hachís, una embarcación de recreo, cuatro embarcaciones neumáticas usadas para alijar la droga, tres vehículos y numerosa documentación financiera.

Antes de este paso, la Guardia Civil logró en una primera fase desarrollada el 31 de diciembre del pasado año interceptar una embarcación recreativa llamada "Lucky Time", de la que intervinieron tres toneladas de hachís que iban a ser descargadas en el puerto de Almerimar por Francisco V.R. y a Francisco G.D., que fueron detenidos.

Las investigaciones sobre este hecho permitieron constatar que la organización integraba en sus filas a un trabajador del puerto de Almerimar, encargado de situar las embarcaciones en el lugar y de garantizar la seguridad y la privacidad de las operaciones.

Durante los aproximadamente ocho meses que ha durado el operativo, la Guardia Civil ha logrado reunir pruebas suficientes contra la red, que se encontraba perfectamente estructurada y que disponía de numerosos miembros dedicados al transporte y guarda de la droga una vez llegaba a tierra, así como de enlaces con los productores en Marruecos.

Los contactos se extendían a Galicia, donde en este tiempo se pudo interceptar un envío de treinta kilos de hachís.

La organización, que embarcaban la droga desde la costa africana en embarcaciones neumáticas para trasladarla posteriormente en alta mar a embarcaciones de recreo que arribaban a diferentes puertos deportivos españoles donde se recogía la droga para su distribución tanto en España como en la Europa Central, contaba con el apoyo un funcionario de Vigilancia Aduanera de Almería.

Este, identificado como Jaime P.R., proporcionaba a la red información sobre la operatividad de las embarcaciones de aduanas minimizando los riegos del transporte de la droga.

Los detenidos, todos ellos españoles de entre 27 y 51 años, de los que ocho residen en Almería, dos en Granada, y una, la única mujer implicada, en Pontevedra, quedaron a disposición del Juzgado de Instrucción 5 de El Ejido acusados de delitos de tráfico de drogas, asociación ilícita y blanqueo de capitales a los que, en el caso del funcionario, se añade el de omisión del deber de perseguir delitos.

El juez dictó orden de ingreso en prisión para todos los integrantes de la red a excepción de José M.M., un vecino de Adra de 31 años que ha quedado en libertad con cargos por asociación ilícita.