Luigi D.G., de nacionalidad dominicana, ha declarado hoy como imputado por un delito de asesinato durante el juicio con jurado popular que ha comenzado esta mañana a puerta cerrada en la Audiencia de Tarragona.

En su declaración ante el Tribunal, el joven, que ha roto a llorar en diversas ocasiones, ha reconocido que el 1 de septiembre de 2007 golpeó al hijo de su compañera sentimental, Yomar José, de 11 meses, porque el pequeño le hizo perder una partida a la videoconsola.

Sin embargo, ha asegurado que su actuación fue fruto de la "locura" por las horas que acumulaba jugando a "Mortal Combat", un juego de la videoconsola "de violencia extrema", y ha asegurado estar "muy arrepentido" de lo sucedido.

"Todavía hoy me pregunto qué me pasó por la cabeza, se me nubló la mente, estaba en otro mundo con la partida, porque a ese niño -la víctima- lo amaba", ha afirmado, tras explicar que su relación con el pequeño era "muy buena, ya que era como un hijo para mí".

Ha añadido que "si no hubiese tenido la videoconsola, puedo asegurar que algo así no hubiese sucedido", y ha explicado que, tras golpear al bebé, no pensaba que le hubiese causado la hemorragia interna que acabó causándole la muerte, porque "en ese caso hubiese salido corriendo hacia el hospital".

Después de Luigi D.G., han declarado Yessica H., madre del menor fallecido y de una niña del procesado, nacida cuando éste ya se encontraba preso.

La mujer, que ha sufrido un ataque de ansiedad cuando sus familiares han increpado y han intentado agredir al acusado, con quien continúa manteniendo una relación afectiva, ha declarado a puerta cerrada y tampoco se ha permitido seguir su testimonio por el circuito de televisión habilitado para la prensa en la Audiencia de Tarragona.

En la sesión de esta mañana también ha declarado una vecina de la pareja, que residía en la calle Maria Antonia París de Reus (Tarragona), quien ha manifestado que, en una ocasión, escuchó gritos de una mujer, procedentes de la casa del acusado, que rogaba: "Déjame, no me pegues, que me vas a matar".

Los hechos juzgados hoy ocurrieron entre las 12.30 y las 14.20 horas del 1 de septiembre del año pasado, cuando Luigi D.G. se había quedado a cargo del menor.

Mientras jugaba a la videoconsola en una habitación del domicilio, el pequeño introdujo una mano en los mandos de ésta e hizo perder la partida al acusado.

Este, golpeó varias veces al niño y lo lanzó sobre la cama, donde lo dejó "mientras éste gemía y se quejaba", hasta que el pequeño se calló, momento en el que llegó la madre, que se dio cuenta de que el niño no reaccionaba, ya que había fallecido a consecuencia de un traumatismo abdominal provocado por una hemorragia intraabdominal, según el fiscal.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de asesinato con la concurrencia de la agravante de parentesco, y pide para Luigi D.G., que se encuentra en prisión desde que fue detenido, una pena de 20 años de cárcel. Además, solicita que indemnice a la madre de la víctima con 95.000 euros.

La acusación popular, ejercida por la Generalitat, y la acusación particular coinciden en la petición del fiscal de una pena de 20 años de cárcel por asesinato, mientras que la defensa reclama la libre absolución de su cliente o, en su defecto, la condena por un homicidio imprudente.