El desastre tuvo lugar el sábado por la mañana en una de las minas de la ciudad de Changzhi pertenecientes a la empresa pública Wangzhuang Coal Mining.

De los 82 mineros que se encontraban en ese momento en la galería principal, 69 habían conseguido escapar en la tarde del domingo.

Los equipos de rescate creen que el agua, alrededor de 10.000 metros cúbicos, procedía de una zona que había sido minada recientemente.

Las minas de carbón chinas son las más peligrosas del mundo, con 3.770 fallecidos en 2007 (cifra que supuso, no obstante, un descenso del 17,7 por ciento con respecto al año anterior), debido a factores como la falta de medidas de seguridad, la minería ilegal, o la sobreexplotación de los pozos.