Esta operación policial se desarrolló el pasado 28 de junio con la realización de 18 registros simultáneos en pisos, en uno de los cuales se halló un arsenal de armas de fuego y blancas, incluida una granada de mano, camuflado en una doble pared de una cocina.

En rueda de prensa, los inspectores jefes Julio Fernández y Pablo Yubero, de la Jefatura Superior de Policía de Cataluña, y el inspector de la comisaría de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) Federico Delgado, han explicado hoy que en la operación se han detenido a un total de 23 personas, tres de las cuales han ingresado ya en prisión y que son el jefe del clan familiar, A.M.J.; su hijo, S.M.J., y la persona a la que se incautó en su domicilio las armas.

Entre los otros detenidos que han sido imputados en este caso aunque no han ingresado en la cárcel, se encuentran miembros de un despacho de abogados, consultores y gestores de Barcelona así como el responsable de una oficina financiera, en la que se intervinieron escrituras de poder a favor de esta persona, cuarenta contratos de depósitos bancarios a nombre de diferentes integrantes del clan y varias de sus sociedades pantalla.

Según la policía, en el despacho de abogados se intervino documentación societaria que, según un primer análisis, podría poner en evidencia durante la fase de instrucción de este caso la realización de operaciones 'dudosas' de blanqueo de capitales, con la colaboración del despacho y bajo la dirección de A.M.J. y de su hijo, así como otros miembros de la familia que actuarían como testaferros.

El importe de estas operaciones superó los cuatro millones de euros entre los años 2006 y 2007 y, en este contexto, los agentes continúan la investigación de las operaciones financieras que habría llevado a cabo el hijo del patriarca de los Jodorovich en Venezuela.

Este clan ha sido el objetivo a lo largo de los últimos veinte años de varias operaciones policiales en los barrios de Can Tunis y de la Zona Franca de Barcelona, donde han tenido siempre su 'sede' y desde donde han controlado las actividades ilegales relacionadas presuntamente con el tráfico de drogas, según las mismas fuentes.

Esta última operación desarrollada por la comisaría de L'Hospitalet y por varias secciones de la Jefatura Superior de Policía de Cataluña es pionera por el hecho de que contempla la vertiente financiera del grupo familiar, al que la autoridad judicial ha bloqueado cuentas en 22 entidades bancarias.

También se ha prohibido la transmisibilidad, enajenación y gravamen de 34 propiedades, dos de las cuales tienen un valor superior al millón de euros, han indicado los inspectores.

La investigación policial se inició en otoño pasado y los agentes localizaron varios domicilios, locales y lugares de encuentro, y también constataron la existencia de una estructura consolidada para la venta de sustancias estupefacientes y de las personas que componían el clan, el padre, varios hijos y otras personas relacionadas.

Dada la importancia de la operación policial, se apostó por la realización simultánea de 18 registros, en los que además del arsenal de armas de fuego y blancas encontrado escondido en una cocina, los policías hallaron 237.668 euros en efectivo, máquinas de contar dinero y cerca de dos kilos de cocaína, con 150 papelinas listas para su distribución.

También se incautaron de doce vehículos de gama alta, varios relojes también de gama alta y un certificado de compra de un caballo de raza.