La operación Lepanto, dentro de la que se enmarca esta actuación, comenzó en octubre de 2007 y ha supuesto un duro golpe para la venta y distribución de drogas a pequeña y mediana escala en la provincia coruñesa, informó la Policía Nacional en un comunicado.

Dentro de la misma se han llevado a cabo seis registros domiciliarios, tres en A Coruña, uno en Monfero y dos en Pontedeume, uno de ellos en el lugar de Boebre, donde se encontraba emplazado el laboratorio.

Siete de los nueve detenidos pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción Número 1 de Betanzos (A Coruña), de los que cuatro ingresaron en prisión.